Padre mío, te fuiste con premuras
ciñendo en tus arterias alba esencia
y en comitiva celestial y fluorescencia
te llevaron en anda a las alturas.
Cual retazos de nieve en sus alburas
perdió tu ocaso luz, sin mi presencia;
quedó el mundo con halo de tu ausencia
y mi vida cubierta de amarguras.
Mas no murió tu voz: sigue encendida
en cada gesto mío, en cada intento,
como un faro que alumbra mi caída.
Tu fuerza me sostiene contra el viento,
y aunque ya no te tenga en esta vida,
Siempre serás el alma de mi acento.
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Autor:
Rosario Bersabé (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 30 de septiembre de 2025 a las 11:29
- Categoría: familia
- Lecturas: 65
- Usuarios favoritos de este poema: Freddy Kalvo, Lualpri, Mauro Enrique Lopez Z., Santiago Alboherna, Josué Jaldin, ElidethAbreu, Salvador Santoyo Sánchez, EmilianoDR, 🇳🇮Samuel Dixon🇳🇮, Nelaery, El Hombre de la Rosa, Enrique Fl. Chaidez, Jaime Correa, Mael Lorens, Alma Eterna
Offline)
Comentarios5
Muy nostálgicos versos mi estimada amiga Rosario.
Un abrazo fraterno.
Muchísimas gracias, Fredy. Un abrazo.
uauu, indudablemente ha sido una gran persona
Cierto, fue una gran persona. Muchas gracias, Santiago.
Bello poema que se basa en la tristeza por la pérdida del padre y el vacío que esto supone.
Sin embargo hay un aspecto muy positivo: ve reflejados rasgos del padre en sí misma.
Muchas gracias por compartirlo, poetisa Rosario.
Saludos.
Muchas gracias, Nelaery, por tu hermoso comentario. Abrazos.
Abrazos.
Hermoso versar estimada poetisa y amiga Rosario Bersabé
Recibe un abrazo de Críspulo
El Hombre de la Rosa
Muchas gracias, por tu visita y comentario. Abrazos.
Bien hecho, aquí mis aplausos,
tu padre está contigo,
pero sigue con su viaje.
¡Ánimo y a seguir!
Muchísimas gracias por venir a comentar mis letras, Jesús Àngel.
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