Y ahí estaba yo
Esperando un mensaje tuyo
Aún sabiendo que seguro estabas ya dormida
Pero ¿Cómo negarle una falsa esperanza a un alma enamorada?
¿Cómo decirle que no, a un adolescente con alma y mente de un niño?
Eso sería como negarle agua a un sitibundo
o como negarle comida a un famélico
Y mientras te esperaba, yo soñaba despierto
Imaginaba como cada movimiento de la pureza del agua
y del dulce azul abrazaban tu ser
Ser que no se ve, pero que sí se siente;
Cómo tu mirada y la mía se entrelazaban,
creando así un nuevo color, una nueva tonalidad café
No de esos cafés que te despiertan, sino de esos que te hacen amar el café
y volverte adicto a él;
Cómo tu cabello era uno con el viento, viento que parecía marea suave,
viento que acaricia, viento que hace llorar de alegría, viento que tranquiliza;
Y como tu sonrisa me brindaba ese blanco, blanco que cautiva, blanco que simboliza paz
blanco que llena el corazón de purezas.
Pero desperté, y no me quedó más que recordarte de nuevo
y recordar todos tus colores.
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Autor:
Poeta vivente (
Online)
- Publicado: 26 de septiembre de 2025 a las 04:45
- Comentario del autor sobre el poema: La verdad, hace tiempo llevo escribiendo unos cuantos poemas (lo que creo que son poemas jaja) y bueno mi cariño hacía por ella en estos versos lo dejo ver, espero te guste amig@ lector(a) y no olvidemos que escribimos, no porque sea bonito, sino porque somos seres sensibles, capaces de querer, de amar y de sentir. Los leo.
- Categoría: Infantil
- Lecturas: 1
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