Poeta vivente

Colores

Y ahí estaba yo

Esperando un mensaje tuyo

Aún sabiendo que seguro estabas ya dormida

Pero ¿Cómo negarle una falsa esperanza a un alma enamorada? 

¿Cómo decirle que no, a un adolescente con alma y mente de un niño?

Eso sería como negarle agua a un sitibundo

o como negarle comida a un famélico 

Y mientras te esperaba, yo soñaba despierto

Imaginaba como cada movimiento de la pureza del agua

y del dulce azul abrazaban tu ser 

Ser que no se ve, pero que sí se siente;

Cómo tu mirada y la mía se entrelazaban, 

creando así un nuevo color, una nueva tonalidad café 

No de esos cafés que te despiertan, sino de esos que te hacen amar el café

y volverte adicto a él;

Cómo tu cabello era uno con el viento, viento que parecía marea suave,

viento que acaricia, viento que hace llorar de alegría, viento que tranquiliza;

Y como tu sonrisa me brindaba ese blanco, blanco que cautiva, blanco que simboliza paz

blanco que llena el corazón de purezas.

Pero desperté, y no me quedó más que recordarte de nuevo 

y recordar todos tus colores.