Todo esto que ahora llaman, tan
Pomposamente, spoiler no
Es sino adelantarte la
Mentira de la que nos van
A hablar.
Una sociedad, ésta, que no lee, que
Ha dejado de leer y que probablemente
Ya nunca leerá, que desprecia la
Palabra escrita hasta el punto
De permitir que las máquinas
Les indiquen en camino
En el futuro es, ya,
Una sociedad
Muerta.
El filósofo Byung-Chul Han contó en una ocasión que la sociedad disciplinaria descrita por Foucault – aún hoy bastante desconocida – era una sociedad de negatividad que estaba llena de muros, de fronteras, de prohibiciones: El hospital, el manicomio, la prisión, el cuartel militar, la fábrica y otros lugares fueron y siguen siendo, hoy, espacios de encierro; encierros macabros donde el poder disciplinaban – y aún disciplina con total libertad – los cuerpos y las mentes mediante la norma y la vigilancia (panoptismo). Yo mismo y antes de mi primera juventud fui testigo y presa de ese sistema: me salvó primero la lectura y después la escritura.
Hoy ya lo sabemos: Los estudiosos e historiadores del futuro lo van a tener muy duro cuando analicen la pandemia cínica de la estupidez que han llenado los primeros años de este nuevo siglo, en especial los últimos y en concreto a partir del Covid 19; en estos tiempo EEUU, Argentina y cada vez más países han caído en un agujero peligroso en que ya la verdad ha dejado de importar nada; ocurrió en el pasado en que una verdad tardó cuatro siglos en ser dada como tal: fue la que le llevó al Vaticano perdonar a Galileo por el tenido como un pecado haber dicho la verdad sobre el cosmos y la posición de la Tierra en él.
La verdad está caída, desautorizada y todos ya somos víctima de este tiempo en que la sufrimos.
-
Autor:
Nkonek Almanorri (
Online)
- Publicado: 21 de septiembre de 2025 a las 18:19
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 21
- Usuarios favoritos de este poema: **~EMYZAG~**, Salvador Santoyo Sánchez
Comentarios1
Es verdad, cada día más personas se enajenan con el uso del celular, obteniendo información somera sobre algún tema, sin profundizar en el; y por tanto creyendose eruditos en esa materia.
Todos los usuarios del celular, que lo hacen indispensable en su vida, van cayendo en una espiral, en la que se abstraen de la realidad, dejandose llevar por los que manejan las redes sociales, llamese (influencer), queriendo destacar; sin darse cuenta que estan siendo manejados por esos influencer y de esta manera
también pierden su libertad.
Por eso es preferible encerrarse en la burbuja de la lectura, para ir creandonos un criterio propio.
Olalá la lectura siga salvando a quienes la practican, de caer en la voragine electronica, que lleva un mal fin, bien oculto.
Saludos Nkonek
Es difícil dejar de someternos a esta tecnología, en general todas la que nos han puesto al alcance para, dicen, facilitarnos la existencia, pero en particular la que llevamos en el bolsillo cuasi como complemento de nosotros mismos. Hasta hoy lunes media Europa está sufriendo en los aeropuertos un ciberataque que ha generado que miles y miles de personas estén retenidas en los aeropuertos, es una de las tantas pruebas, peligrosísimas, a las que estamos sujetos al ser personas unidas a un vínculo que no podemos controlar, más bien todo lo contrario. También ocurre, empieza a ocurrir, que para cuando nos demos cuenta en profundidad no es verdad de que sea la tecnología la culpable de todo sino el mal uso que le damos a ésta, para que esto ocurra habrá que descubrir primero y saber después que el hombre, la mente humana, fue, previamente, manipulada mediante diferentes técnica para a continuación poner a su alcance las herramientas de control colectivo. Hoy, por increíble que pueda parecer, el conocimiento de la realidad en cierto modo obliga y conduce al hombre a la soledad al verse sentirse solo y desplazado en medio de una sociedad de la \\\"información\\\" y a la vez totalmente desinformada de su realidad más íntima; todo esto conduce a una especie de destrucción colectiva que tarde o temprano será a nivel mundial.
Ya la cuestión no es huir hacia adelante como siempre nos han empujado y hasta recomendado, no. La verdadera y más efectivas de las huidas es hacia atrás, hacia un origen del cual aún tenemos conciencia, y hasta la certeza, de que está ahí y una de las maneras de hacerlo, por insignificante que lo parezca, es volver a escribir a tinta, e incluso a lápiz otra vez: recuperar el inicio.
Gracias por tu respuesta y comentario.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.