GOLPE AL CAPITALISMO

José Mario Calero Vizcaino

Y cuando —los hombres—
volvemos a ser animales,
vulnerables… perdemos el control
en los umbrales.
¡No!
¡El control no, bajo estos vendavales!

Así son los ciclos —naturales—:
ruedan, suben, revientan, colosales;
más poderosos…
¡No!
¡Más poderosos no, que no dicten sus caudales!
¿Que el hombre?..
¡No! —con sus rituales.

Todo lo que sube
tiene que bajar, dice la fiebre y sus cordales.
¡No! —repiten la torre y la bolsa,
con sus credos mercantiles y sus señales.

El hombre construye
como si el cemento fuese eternidad, sin desistir;
pero más fuerte es el derrumbe psicológico
que el material, al porvenir.
Primero quiebran las certezas —disparen los portales—,
luego crujen, uno a uno, los cristales, por asistir.

Comienza una era nueva:
antes de septiembre de 2001,
después de septiembre de 2001 —un partir.
Sirenas, polvo, pantallas; contamos pérdidas,
inventamos nombres, reaprendemos el miedo
que vuelve, como un ruedo, a insistir.

Y ahora, entre ruinas mentales y andamios,
entre cifras y hambre, entre humo y porvenir:

¿Cómo queremos reconstruir?
¿Con la prisa del mercado
o la paciencia del árbol por latir?
¿Con memoria —y su justicia—
o con el mismo molde por seguir?

¿Cómo queremos reconstruir?

  • Autor: Orelac - el Arquitecto Verde (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 18 de septiembre de 2025 a las 10:45
  • Comentario del autor sobre el poema: NOTA INTRODUCTORIA: Este poema y la pintura que lo acompaña fueron concebidos en un momento de conmoción mundial. El 11 de septiembre de 2001, mientras cursaba la licenciatura en Arquitectura y Diseño Urbano en la Ciudad de México, fui testigo a distancia —a través de la televisión y los medios— del ataque aéreo a las Torres Gemelas de Nueva York. El acontecimiento me impresionó profundamente: no sólo por la tragedia humana, sino también por lo que significaba para quienes estábamos aprendiendo a leer la ciudad, sus símbolos y sus estructuras. Las torres, concebidas como íconos de poder económico y tecnológico, se convirtieron en ruinas de humo y escombros en cuestión de horas. De ahí surge este texto, que oscila entre el grito y la reflexión, entre la impotencia del individuo y la fragilidad de las grandes construcciones humanas. Es un intento de registrar el impacto psicológico y cultural de un suceso que marcó un antes y un después, no sólo en la historia global, sino también en mi propio camino como arquitecto y creador.
  • Categoría: fecha-especial
  • Lecturas: 5
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.