No hay mejor medicina
que los ojos del deseo,
que acrecen el apetito
compartido de dos latidos.
En la piel, en cada poro
se abre el punto preciso
donde el amor con un beso
emerge sobre el horizonte.
Lo supe al verte y sentirte
cuando nos saludamos
con un beso en la mejilla;
y al estremecerse mi interior
cuando besé tu sonrisa.
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Autor:
Salva Carrion (
Online)
- Publicado: 2 de septiembre de 2025 a las 09:05
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 3
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