Éramos silencio
antes de que existiera el tiempo.
Éramos un suspiro perdido
en el pecho del infinito.
Del corazón de un sol extinguido
nacieron nuestros huesos,
y en cada mirada que arde
late la memoria de un universo antiguo.
Somos polvo de estrellas,
hijos del fuego y del abismo,
fragmentos de eternidades rotas
aprendiendo a ser humanos.
Llevamos galaxias en la sangre,
constelaciones escondidas en las manos,
y, aun así, creemos que somos pequeños…
cuando en realidad somos infinitos.
Un día volveremos a la nada,
al silencio donde todo comenzó,
pero mientras tanto,
seremos eternidad respirando en carne,
luz temblando bajo la piel,
universo mirándose a sí mismo
a través de nuestros ojos.
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Autor:
Daniii (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 30 de agosto de 2025 a las 07:29
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 3
Comentarios1
Muy bueno!!!
ahora mismo estamos viviendo la eternidad, dentro de un universo vivo y en expansión.
Lo único, tengo dudas de que la nada exista, me explico:
Sí todo interactúa con algo,
y ninguna estrella,
se sostiene por si sola.
Sí es clara y evidente la interacción universal,
¿Con qué interactúa la nada?
Hay te lo dejo para tu reflexión.
Sigue dándole sin parar a tu pluma,
tejiendo esas costuras del alma.
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