El tallo besó su rostro calido,
curiosamente, volteó sin ver.
Desatinada, tocó al ofrecido
tallo, que se marchita por querer...
La dama se sonroja, y compadece
su fría coraza, mientras lo mira;
Saturando sus hojas, lo enfurece,
torpe lo calma, tocando su lira...
Tonta pequeña, curarlo no puedes.
Menos en invierno, le duele más...
Cuidado, que sin fino esmalte quedes
y arrojes el bien, que no olvidarás.
-
Autor:
Marco Montana (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 21 de agosto de 2025 a las 01:14
- Comentario del autor sobre el poema: Mis estimados poetas, con respeto y cariño, espero y sea de su agrado. Les comparto este escrito en formato de serventesio, cualquier observación, no duden en decírmelo. En fin... este tallo tosco, y ordinario... me representa perfectamente... Sodulas y zosarba.✊🖖Derechos Reservados en Proceso.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 5
- Usuarios favoritos de este poema: Roberto D. Yoro, alicia perez hernandez
Comentarios1
Querido poeta,
Me ha conmovido tu poema. Ese tallo que se marchita por querer es una imagen muy hermosa y, al mismo tiempo, muy real: el amor como fuerza que da vida y también desgasta.
La dama que observa y compadece me recordó esa impotencia que todos sentimos alguna vez, cuando queremos aliviar un dolor ajeno y sabemos que no está en nuestras manos. Y ese cierre tan sabio es una advertencia que llega al corazón: cuidar lo que tenemos antes de perderlo.
Gracias por regalarnos versos tan sensibles y llenos de verdad.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.