La gente me dice,
que tengo un corazón de vinagre,
y cabeza grande,
pero también una mente relevante...
Y algo me oprime,
cuando mi suerte se pone grave,
y el dolor me pudre,
por lo que soy un triste personaje...
¡Oh, mi pesadumbre!
como una espina clavada en sangre,
en mi carne de hombre,
fermentando, un ardor pensativo y constante...
Y todo ello me destruye,
a mi doble y a mi triple, tumbado y de pie,
sin que nunca me plantee,
una solución dialéctica favorable...
-
Autor:
el brujo de letziaga (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 19 de agosto de 2025 a las 02:55
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 4
- Usuarios favoritos de este poema: Roberto D. Yoro
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.