Asumí mi adultez.
Dejé de buscar culpables
por lo que sembré y coseché.
Y desde este lugar —
un hombre mediocre, aprendiz eterno—
me atrevo a decir lo que creo de la amistad.
La amistad, como el amor,
es un pacto sin contrato,
un lazo que no se desgasta con el tiempo
ni se mide en kilómetros.
Es incondicionalidad recíproca
entre almas que saben
que el afecto verdadero
sobrevive a todo.
La vida nos llena de vínculos:
familia, compañeros de infancia,
gente con la etiqueta de “amigos”.
Pero el verdadero amigo
no necesita la antigüedad
ni la cercanía física.
Es quien no miente,
quien no maquilla la realidad
y no teme herir tu oído,
porque sus palabras no buscan calmarte,
sino despertarte,
empujarte,
moverte hacia tu mejor versión.
Me siento afortunado.
Tengo amigos.
Pero he aprendido que,
a medida que uno crece,
ese título se vuelve sagrado.
No se regala.
No se compra.
No se pide.
Un amigo es un amor sin contrato,
un ser que eligió serlo
sin que jamás le pidieras serlo.
Luis prieto
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Autor:
Luis prieto (
Offline)
- Publicado: 11 de agosto de 2025 a las 01:42
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 12
- Usuarios favoritos de este poema: Henry Alejandro Morales, alicia perez hernandez, Antonio Miguel Reyes, Hernán J. Moreyra, Mauro Enrique Lopez Z., Lualpri
Comentarios1
Excelente!
Tus palabras son la mías así tal cual!
Buen día para ti!
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