Amistades falsas son veneno puro.

La Hechicera de las Letras


AVISO DE AUSENCIA DE La Hechicera de las Letras
Volví a mi nombre original: La Hechicera de las Letras. No hay giros ni explicaciones innecesarias que dar, solo la reafirmación de lo que siempre he sido.

Quien quiera entender, que lea; quien no, ya sabe que pase de largo.

Aquellos que me bloquean o insisten en ese gesto infantil, no los leo ni les presto atención. Solo una carta con disculpa pública —y aun así— la reconsideraré.

No acepto solicitudes de amistad. No pierdan el tiempo.

Amistades falsas son veneno puro.


Si dices ser amigo, di la verdad, 
que la mentira es red para el sabotaje,
la lealtad no juega a la falsedad.

 

Quien envenena sonríe en su crueldad,
no hay pacto en silencio que no se baraje,
si dices ser amigo, di la verdad.

 

Los falsos abrazos son la vanidad,
la honestidad hiere... pero es sin peaje, 
la lealtad no juega a la falsedad.

 

No hay confort en la fría realidad,
la traición se oculta por simple chantaje,
si dices ser amigo, di la verdad.

 

La tinta engendra la absurda necedad,
criticar sin valor, enreda el ultraje,
la lealtad no juega a la falsedad.

 

No es dolor, es cobarde comodidad,
solo se lástima al que esquiva el coraje,
sí dices ser amigo, di la verdad,
la lealtad no juega a la falsedad.

 

La Hechicera de las Letras.

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Comentarios14

  • Luis prieto

    Hermoso , la amistad es sinónimo de amor e incondicional es amor del mas puro dar sin esperar nada , las amistades falsas no existen la amistad es una sola y es incorruptible gracias por compartir tu poesía saludos desde uruguay

    • La Hechicera de las Letras

      Tu comentario parte de una visión idealizada. Posee la candidez del ideal platónico, el cual valoro, pero que este poema no comparte. No es una oda a la amistad como valor absoluto, sino una advertencia.

      Este texto no celebra la amistad incorruptible —al contrario— la cuestiona: cuando se pronuncia como palabra noble pero se practica como herramienta de manipulación, silencio o conveniencia.
      Expone la traición encubierta, el gesto hipócrita, el vínculo tóxico camuflado de lealtad. Su propósito es quitar el velo social de cortesía para mostrar que la mentira, aunque envuelta en afecto, sigue siendo veneno.

      Saludos desde un espacio donde las palabras valen lo que pesan.

      La Hechicera de las Letras

    • Nkonek Almanorri

      La amistad, en todos los campos y facetas de la vida misma, es relativa; no se puede esperar que nadie pueda dar lo que no tiene y a partir de ahí decir la verdad es un imposible.

      • La Hechicera de las Letras

        La amistad es un territorio complejo, poblado de limitaciones y contradicciones humanas. Claro que nadie da lo que no tiene, por eso trazo un mínimo ético innegociable. Justamente por eso, no todos deberían atreverse a llamarse amigos. Esa palabra, en boca de los pusilánimes, es una blasfemia. Si no se tiene el coraje de señalar la podredumbre cuando la hueles, entonces no se es leal. Se es cómodo. Eso no es amistad, es conveniencia vestida de afecto.

        Mi poema no se pierde en relativismos que excusan la hipocresía disfrazada de afecto. No, es una línea clara y afilada: si dices ser amigo, di la verdad. Esa es la base, lo que evita que la amistad sea mera ficción, un juego donde la mentira se celebra con sonrisas hipócritas.

        Exigir valentía para sostener la lealtad no es un capricho ni una ilusión. Es un acto de respeto, una declaración que deja sin lugar a las cobardías y los silencios traicioneros.
        La verdad, aunque duela, es el único pacto digno entre quienes se llaman amigos. Si alguien no está dispuesto a sostener eso, mejor que abandone la fachada cuanto antes.

        Que la amistad no sea perfecta, no la convierte en tierra de nadie. Hay límites. Uno de ellos es este: si no dices la verdad, no te atrevas a llamarte amigo.

        La Hechicera de las Letras.

        • Nkonek Almanorri

          Coincido en su totalidad con tus palabras, incluida las formas. Con lo poquito que llevo aquí y leyendo de todos un poco ya he descubierto que pedir esto que llaman amistad implica el riesgo, verdadero, de mentir; de que me mientan. Nadie quiere que le digan qué en verdad lee de cada cual:

        • Salvador Santoyo Sánchez

          Que difícil es decir la verdad.
          Quién es poseedor de ella?
          La verdad, no peca, pero incómoda.
          Saludos hechicera de las letras

          • La Hechicera de las Letras

            Qué difícil es decir la verdad. Pero lo verdaderamente difícil —y lo que expongo— es soportar el silencio de quienes se dicen amigos y no lo son. Para ser clara, un ejemplo: me refiero a quienes aplauden versos, pero en privado envenenan, de quienes aparentan ser leales para no arriesgar sus lugares seguros.

            Así que no estoy hablando de verdades absolutas ni de debates filosóficos sobre quién tiene la razón. Hablo de la verdad concreta, la que se elige callar por cobardía, la que se evita para no incomodar al grupo, la que se esconde detrás del elogio barato y del “qué bonito escribes” entre “poetas” que se temen. Esa verdad necesaria, que no se dice para no romper la coreografía hipócrita.

            Cuando digo: “si dices ser amigo, di la verdad”, no es una demanda imposible; es una invitación directa a la coherencia, a dejar de fingir afecto cuando hay distancia, decir lo que se piensa, aunque duela. No pido guerra. Pero tampoco celebro la paz de los mudos.

            Señalo lo que todos ven y pocos dicen. Ese mutismo, ese miedo disfrazado de cortesía, eso sí que merece una respuesta honesta.

            El límite está marcado: Sin verdad, no hay amistad posible. Lo demás es compañía de ocasión, abrazo falso, silencio cobarde, lealtad de utilería para decorar apariencias. Que no se hable de afecto si no se trae la verdad entre los dientes.

            Saludos Salvador Santoyo Sánchez.

            La Hechicera de las Letras.

            • Salvador Santoyo Sánchez

              Estoy de acuerdo totalmente.
              Buen día hechicera 👍🏻

            • Antonio Miguel Reyes

              Ante esto el oído es el que dicta, o eso creo.
              Gracias por tu exposición que permite mucha reflexión.
              Un saludo

              • La Hechicera de las Letras

                Curioso que se apueste al “oído” como juez supremo de la poesía. Aquí no importa que algo “suene bien”; este poema exige verdad y lealtad sin comodidad ni indiferencia. La “amistad” sin el temple para decirla es solo apariencia banal. La poesía se sostiene en la integridad de lo vivido. La honestidad se impone, sin negociaciones.

                La Hechicera de las Letras.

              • MISHA lg

                La verdad que se oculta bajo cualquier definición es deshonestidad poetisa
                interesantes tus letras
                gracias por compartir

                La tinta engendra la absurda necedad,
                criticar sin valor, enreda el ultraje,
                la lealtad no juega a la falsedad.

                besos besos
                MISHA
                lg

                • La Hechicera de las Letras

                  La verdad en la amistad debe decirse sin rodeos ni eufemismos. Es íntegra – No se adapta para complacer, ni se negocia para mantener una falsa armonía. La transparencia no es solo una virtud, sino una exigencia ineludible en el arte y en la vida, donde la palabra no se prostituye. Ocultar la verdad bajo definiciones no solo distorsiona el mensaje, sino que desarma la pureza que debería sostener cualquier vínculo, debe vivirse no a medias tintas, sea humano o creativo.

                  La palabra, cuando se emancipa de toda carga de intereses, falsedad e hipocresía se convierte en instrumento de fortaleza interna, de resolución y de lealtad. En ese terreno, no hay lugar para la ambigüedad: la verdad, aunque áspera, limpia el terreno y desarma la necedad que engendra la mentira encubierta.

                  Así, la honestidad es la única forma real de lealtad, porque es la que se sostiene sin necesidad de ocultar, retocar o negociar la esencia.

                  Besos poetisa.

                  La Hechicera de las Letras.

                • LORENZO ARATU

                  Testigos somos.
                  Multitud de frases construidas para la manipulación y el mutismo como cómplice de la conveniencia; en realidad un simulacro de "amistad" utilizada como moneda de cambio.

                  • La Hechicera de las Letras

                    Sin sorpresa alguna la maquinaria de palabras que manipulan y el engaño que encubre intereses. Esta supuesta amistad es un vínculo interesado, una relación utilitaria basada en la búsqueda de beneficios personales, no en el afecto genuino ni en la confianza mutua, es moneda falsa, vendida para sostener acuerdos sin alma.

                    Tu reflexión rasga el velo que tantos se empeñan en mantener firme y oscuro. En este terreno podrido, la honestidad no es opción ni juego: es la única trinchera donde aún queda algo que defender.

                    La Hechicera de las Letras.

                  • El Hombre de la Rosa

                    Genial y hermoso tu versar estimada poetisa y amiga
                    Recibe un abrazo de tu amigo español
                    El Hombre de la Rosa

                    • La Hechicera de las Letras

                      Las frases bonitas se gastan rápido; la verdad, no. Lo que escribí se sostiene en la lealtad pura, esa que no teme. Mi palabra no se ofrece en bandeja, se impone como exigencia para quien quiera comprender.

                      Saludos Hombre de la Rosa.

                      La Hechicera de las Letras.

                    • Una voz

                      Hay realidades con las que no se negocia, hay verdades que al decirlas duelen, pero si se callan matan. Lo cierto es que para ser amigos, para cualquier relacion o vículo humano sano, la verdad pura y sin mancha debe ser eje invariable y base del todo.

                      Saludos poetisa Hechicera de las letras, un honor leerte.

                      Dios te bendiga.

                      • La Hechicera de las Letras

                        La verdad no es concesión ni flor de adorno para el ego débil; no se ofrece ni se suplica: se impone y se revela, exponiendo lo que otros prefieren enterrar bajo mentiras cómodas. En la amistad y en la escritura no hay espacio para la tibieza: callar es decidir ser traidor. Esa traición disfrazada de compañía solo merece el desprecio que no teme exhibirse.


                        La Hechicera de las Letras

                      • Javier Julián Enríquez

                        Muchas gracias por este gran y reflexivo poema, en cuyas ideas objetivadas se puede apreciar la naturaleza de las relaciones amistosas y la lealtad como antítesis de la falsedad y el engaño. Así, podríamos decir que, mediante una estructura repetitiva que destaca la relevancia de la sinceridad en las relaciones interpersonales, el poema se convierte en una reflexión sobre la hipocresía y sus implicaciones. En este sentido, la metáfora del «veneno puro» podría ser interpretada como una representación simbólica del daño infligido por la traición, mientras que los «falsos abrazos» podrían ser vistos como una representación de la superficialidad y la vanidad que a veces caracterizan a las relaciones basadas en la mentira. Por otra parte, la honestidad, aunque pueda ser percibida como desafiante, se presenta como un valor superior, libre de los condicionamientos que pueden surgir del «chantaje» y la «cobarde comodidad» que ofrece la falsedad. Asimismo, podríamos decir que la metáfora de la «tinta» que engendra la «necedad» alude a la crítica infundada y al daño causado por el «ultraje». El poema concluye con una significativa afirmación: la verdadera amistad se fundamenta en la autenticidad, en la valentía de enfrentar la realidad, desestimando de esta forma la comodidad de la mentira y la cobardía de la traición. En esencia, se puede percibir que el poema presenta una reflexión moral sobre la autenticidad en las relaciones humanas, que destaca el valor de la lealtad y la honestidad como pilares fundamentales de la amistad genuina. La epímone o reiteración del verso «si dices ser amigo, di la verdad» refuerza la idea central, convirtiéndola, por así decirlo, en un imperativo moral.
                        Un cordial saludo y fuerte abrazo con mi más afectuoso aprecio



                        • La Hechicera de las Letras

                          Javier, tu comentario demuestra buena intención y esfuerzo encomiable por entender las entrañas del poema, pero déjame decirlo con la honestidad que merece: si esto fuera una tertulia, aquí la cortesía se ha colado disfrazada de análisis. Tu lectura ordenada y profunda invita a reflexionar con seriedad, que es justo lo que se pide: confrontar la hipocresía sin diluirla en palabras cómodas. La verdadera lealtad es decir sin filtros, sin concesiones, sin pedir permiso ni ofrecer abrazos.

                          La amistad no es un apapacho de azúcar ni un pacto de falsa ternura. No se anda con rodeos ni besitos de buenas noches para ir a dormir; es un filo que parte en dos la necedad disfrazada de lealtad. La voz que habla sabe que la verdad no se vende en envoltorios bonitos, ni se ofrece como regalo sin espinas. No es un sermón amable, es un golpe limpio, necesario, que abre la herida para evitar la infección de la hipocresía.

                          Prefiere la herida que duele a la caricia que envenena lentamente sin apenas notarlo, porque en ese estrés emocional en estado puro y sin ese tamiz de la razón se forja la verdadera integridad. No hay amistad sin conflicto, no hay lealtad sin valentía para encarar lo oscuro. Se planta firme en esa densidad moral que pocos soportan, porque sabe que la verdad no es cómoda, pero es lo único que mantiene viva la dignidad.

                          Saludos cordiales Javier.

                          La Hechicera de las Letras.

                        • Santiago Alboherna

                          Hechicera, pero q conjuro tan poderoso te mandaste !! filoso cual navaja, necesario como el agua, oportuno como un político decente.
                          Tu poema divide las aguas del Portal como Moises el mar rojo...

                          Síntesis de la Amistad

                          No es un caldo de verdura
                          ni un pastel de cumpleaños
                          es ir escalando peldaños
                          con la verdad y la cordura.

                          Inmortalitatem quaere cara Maga, quaere...

                          el poeta carente

                          • La Hechicera de las Letras

                            Mas que conjuro, es sentencia Poeta Carente: la amistad sin verdad es un cadáver embalsamado, hermoso solo para quien prefiere la apariencia al pulso vivo, no vendo flores para coronas falsas; la cortesía vana y el silencio cómplice son incienso para altares de idiotas.
                            Prefiero la herida limpia a la caricia podrida, porque quien no soporta la verdad es un ser de cristal barato: frágil, opaco y con la ilusión de ser fino. Vive anestesiado por sus propias mentiras, se alimenta de halagos rancios y huye de todo que no le devuelva una imagen complaciente.

                            Veritas amicitiae fundamentum est; sine ea, nihil nisi pulchra cadavera manent.


                            La Hechicera de las Letras.

                            • Santiago Alboherna

                              da la sensación que haces foco y énfasis en la verdad en manera desmedida, pero no es así, sino q dicho énfasis es merecido. Dice alguien q se arrogó naturaleza divina: "conocerán la verdad, y la verdad los hará libres" ...

                            • CBR

                              Agradezcamos a esos mendigos del desván,
                              los que tartamudean en privado,
                              babeando rencor en tazas agrietadas,
                              llenas de tropezones de chocolate y bizcocho,
                              re lavadas con esencia de cloaca.

                              En público se estiran el cuello
                              como capullos que caen al inframundo,
                              desesperados en su papel
                              de catetos de diccionario reciclado.

                              Juran que su taza es la mejor.
                              Cada sorbo son gérmenes.
                              En porcelana fina apariencia
                              son cultivo de bacterias que los desollan.
                              Y aun así, brindan por su propia miseria.

                              Yo, como insecto, no rujo, solo zumbo.
                              Tú, Hechicera, ni siquiera los amas con desprecio.
                              Los diseccionas sin remedio,
                              y ellos, como hormigas ebrias,
                              siguen lamiendo las gotas de tu tinta,
                              confundiendo el veneno
                              con psicotrópicos que los adiestran.

                              • La Hechicera de las Letras

                                Soy una excelente observadora CBR. No soy ni encantadora ni musa: si se requiere, soy bisturí en mano, clavando precisión quirúrgica donde otros solo muerden con rabia, despiadada con la mentira y la superficialidad. Pero también, con quienes prefieren seguir viviendo en su propio engaño. No hay amor ni desprecio en mi exposición, solo la fría luz que expone la podredumbre oculta.

                                En mensajes privados. No todos se conforman con morderse la lengua en la sombra. No molestan abiertamente, sino que están atrapados en un rencor interno que los corroe y que, aunque silencioso, resulta contagioso o tóxico. Algunos, demasiado cobardes, disfrazados de susurros, se dedican a picar y envenenar en privado, creyendo que la oscuridad los protege. Mordisquean reputaciones, escupen ponzoña entre dientes y fingen inocencia mientras desgarran por detrás. No tienen el valor de enfrentar con honestidad, pero se regodean en la miseria ajena con la precisión de buitres de cloaca. Son la podredumbre disfrazada de discreción, la amenaza invisible que carcome desde el silencio.

                                No reparto inventarios de mediocridad; cada quien lleva su propia lápida y el silencio que prefieren es el que sepulta las imposturas. Los nombres son irrelevantes porque estas actitudes infestan cualquier círculo. Esa podredumbre no depende de una persona sino de la dinámica que permiten. Espero que quienes reconozcan esas actitudes tengan el valor de denunciar y cambiar lo que daña el espacio. Mi palabra solo señala la red de resentimientos, la limpieza depende de ustedes.

                                La Hechicera de las Letras.

                              • El Hombre de la Viola Tronchada

                                Saludos gentiles internauta, solo quería comentarle sobre su métrica. Le recomiendo probar el esquema de tercetos encadenados, que es similar al suyo, y evitar la rima fija y rimar las mismas palabras para enriquecer el poema.

                                Le habla Nieto de Rivera

                                el Hombre de la Viola Tronchada

                                • La Hechicera de las Letras

                                  Cada cuatro meses renuevo el formato poético. La villanelle no es elección al azahar, es un linaje que comprende el rigor de la repetición medida. Mi alianza con esta estructura me exime de caer en la imitación barata.

                                  Su pulso insistente, casi hipnótico, no se desgasta en lugares comunes. Exige un dominio técnico sin concesiones, ese rigor formal se contrapone al filo cortante del mensaje, amplificando su impacto. Es el equilibrio preciso entre la elegancia de la tradición y la fuerza implacable del contenido.

                                  La Hechicera de las Letras.

                                  • El Hombre de la Viola Tronchada

                                    Mala mía, no conocía esta composición anglosajona.

                                  • JAVIER SOLIS

                                    Excelente análisis y conclusiones sobre la verdadera amistad
                                    Muy ineteresante
                                    Con aprecio
                                    JAVIER

                                  • JAVIER SOLIS

                                    Excelente análisis y conclusiones sobre la verdadera amistad
                                    Muy ineteresante
                                    Con aprecio
                                    JAVIER



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