Madrigal

Fabio de Cabrales

Musa desvanecida:
oye mi voz, en fuego
amoroso encendida.
Oye cómo me entrego
a tu amistad perdida,
pues me dejaste ciego
apenas fui por tu luz alumbrado,
¡oh, musa que de mí te has alejado!

A tu sombra distante,
fuego desvanecido,
te sigo, siendo amante
en tu amistad perdido.
¡Oh, brillo del diamante
que en luces dividido
a la distancia alejado se parte,
esquivo, delicado y lleno de arte!

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Comentarios +

Comentarios1

  • El Hombre de la Rosa

    La genialidad de tu pluma alumbra tus bellas estrofas de sabiduria gracias Gazpar de Cabrales
    Saludos desde el Norte de España de Críspulo
    El Hombre de la Rosa



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