🛑LO QUE NOS QUEDA🛑

Carlos Baldelomar

Vos sabés cómo es esto,

solo que a veces

es más fácil hacernos distraídos.

 

Es que, para este armario de penas

y estas hebras rotas,

los espejos de nuestros ojos

bastan

para reconocernos.

 

Unas veces nos delata la mirada,

esa que trae marcadas

huellas de angustia

sobre la superficie tibia

y empañada;

y otras, puede que sea ese olor

a melancolía:

olor a lluvia de invierno

y un pedacito de sol

que apenas acompaña.

 

Y sí,

en la niebla siempre nos golpea el frío,

y buscás refugio

a medio paso,

a medias palabras.

 

Al final de todo,

uno está aquí,

no para quitarte esa pena congelada,

sino para dejar que esta tristeza,

al ser de a dos,

algo se nos condense

y algo se nos escurra.

 

Y es curioso,

porque esa gota que se forma,

esa que titubea y se desliza,

va dejando un surco

limpio y transparente.

 

Suficiente para ver nuestros ojos

 reconociéndonos

entre ese pasadizo labrado.

Y eso, es lo que nos queda:

algo que se parece más

a una esperanza,

que aquello

que llaman amor.

 

Ver métrica de este poema
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.