TORMENTAS POR UN DESTELLO

Celiaap

Es asombroso lo que revela

la simple observación humana,

cuando se enfrenta al mundo.

 

El hombre hambriento de mirada ajena,

es capaz de volcar la tierra,

incendiar sus días,

con tal de ser visto,

Aunque sea un instante.

 

Que tragedia,

empeñarse en hazañas imposibles,

no por amor al logro,

sino por miedo al olvido.

 

El dolor, compañero inolvidable,

habita en todos,

pero no todos le permiten devorarlos.

 

Y es curioso:

las luces que más nos guían,

suelen nacer

de las sombras más hondas.

Pinto Celia.

Ver métrica de este poema
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.