AVISO DE AUSENCIA DE La Hechicera de las Letras
Volví a mi nombre original: La Hechicera de las Letras. No hay giros ni explicaciones innecesarias que dar, solo la reafirmación de lo que siempre he sido.
Quien quiera entender, que lea; quien no, ya sabe que pase de largo.
Aquellos que me bloquean o insisten en ese gesto infantil, no los leo ni les presto atención. Solo una carta con disculpa pública —y aun así— la reconsideraré.
No acepto solicitudes de amistad. No pierdan el tiempo.
Volví a mi nombre original: La Hechicera de las Letras. No hay giros ni explicaciones innecesarias que dar, solo la reafirmación de lo que siempre he sido.
Quien quiera entender, que lea; quien no, ya sabe que pase de largo.
Aquellos que me bloquean o insisten en ese gesto infantil, no los leo ni les presto atención. Solo una carta con disculpa pública —y aun así— la reconsideraré.
No acepto solicitudes de amistad. No pierdan el tiempo.
La ausencia escribe todo lo que callas.
En el silencio se alza la agonía,
la noche en que germina el aislamiento.
El alma finge con su profecía.
No hay luz que ensucie tanta letanía,
rostros lejanos hieren el aliento.
En el silencio se alza la agonía
Cada latido es espina que envía
y su filo nace del pensamiento.
El alma finge con su profecía.
La mente, fiera, que antes moriría,
exilio hecho con claro asentimiento.
En el silencio se alza la agonía.
Sin refugio ni falsa compañía
ningún cobarde soporta el tormento.
El alma finge con su profecía
Besar la ausencia con fría osadía,
mantener firme un falso juramento.
En el silencio se alza la agonía,
el alma finge con su profecía.
La Hechicera de las Letras.
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Autor:
La Hechicera de las Letras (
Offline)
- Publicado: 2 de julio de 2025 a las 01:32
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 284
- Usuarios favoritos de este poema: MISHA lg, Lualpri, El Hombre de la Rosa, pasaba, Llaneza, Freddy Kalvo, Antonio Miguel Reyes, Javier Julián Enríquez, Josué Jaldin, Pilar Luna, Carlos Armijo Rosas...✒️, William26🫶, alicia perez hernandez, Ricardo Castillo., JAGC, Javier., Nelaery, JoseAn100, 🍷✨️MariPD, Classman, Santiago Alboherna, WandaAngel, CBR, mallito... (Viento de amor), Mauro Enrique Lopez Z., Jaime Correa, Basil, mauro marte, Una voz, • Poemas del ㄥobo •, RENNY LOYO, Manu cramps
Comentarios5
La mente tan poderosa a veces y tan fragil otras
bellas letras poetisa
gracias por compartir
La mente, fiera, que antes moriría,
exilio hecho con claro asentimiento.
En el silencio se alza la agonía.
besos besos
MISHA
lg
Es cierto Misha. El silencio no es mudo; lo que callamos no desaparece, sino que se manifiesta en forma de ausencia. Este poema explora cómo la conciencia se miente a sí misma, simulando claridad, destino y sentido, cuando en realidad está perdida y erosionada por su propia ausencia. No es solo fragilidad, sino un engaño consciente para soportar la agonía que crece en la soledad profunda.
Saludos poetisa besos.
La Hechicera de las Letras
Hermoso y genial tu preciado versar estimada poetisa y fiel amiga La Hechicera de las letras
Saludos de Críspulo desde Torrelavega
El Hombre de la Rosa
Este poema puede sonar bello en el lenguaje, pero su mensaje es menos amable. Habla de ese silencio donde nadie te acompaña y el alma se inventa mentiras para no quebrarse.
Saludos, amigo Hombre de la Rosa.
La Hechicera de las Letras.
Muchas gracias por este sublime poema y real como la vida misma, cuyas ideas objetivadas en él parecen transmitir una reflexión íntima sobre la angustia existencial y el aislamiento, abordados con sensibilidad y respeto. De esta manera, la «ausencia» se presenta como una entidad que revela lo silenciado, mientras que el silencio mismo se convierte en el reflejo de la agonía. Asimismo, la noche, en su silencio y oscuridad, puede ser un momento propicio para que el alma busque su propio aislamiento y, a través de la «profecía», simule una realidad distorsionada. Por otra parte, la letanía, en su oscuridad, acentúa la sensación de distancia y sufrimiento. Cada latido, como una espina, surge del pensamiento, revelando una lucha interna. La mente, que en el pasado se caracterizaba por su fortaleza y determinación, se ve ahora sometida a un exilio autoimpuesto. En la ausencia de refugio y compañía, el sufrimiento puede ser abrumador, llevando a buscar consuelo en la ausencia con audacia y a mantener una promesa que no se puede cumplir, perpetuando así un ciclo de agonía y simulación.
Un cordial saludo y fuerte abrazo
Tu lectura, Julián, aborda con respeto y cuidado muchas imágenes del poema; eso contribuye a expandir su interpretación, pero hay dos núcleos esenciales que son la sustancia que sostiene el texto.
“Hablar en silencio sin compañía / ningún cobarde soporta el tormento” revela un instante de confrontación total con uno mismo, sin distracciones ni testigos. Es una soledad absoluta que demanda una valentía extrema. Esta experiencia muestra el acto de sostener una verdad desnuda en completo aislamiento.
Besar la ausencia con fría osadía no implica un gesto de consuelo o resignación, sino un acto frío, deliberado y sin esperanza; un desafío íntimo frente a la nada. Interpretar ese gesto como “buscar consuelo” diluye la fuerza de lo esencial: la frialdad y la osadía con la que se enfrenta la ausencia, sin ilusiones ni esperanza.
El alma miente. No por maldad, sino por debilidad estructural. Sostiene promesas que ya no cree, simula vínculos, adopta credos como si fueran tanques. No para amar, no para creer: para no derrumbarse. Esa es la cobardía que el poema denuncia sin sermones. No culpa al mundo ni al destino; se dirige al alma que, con pleno conocimiento, elige fingir. Fingir fe, esperanza, pertenencia. Fingir una profecía que no cree, pero que le permite seguir en pie.
Cuando se renuncia a la mentira íntima, la soledad no solo llega: se vuelve inevitable. Es una traición íntima, pulcra, cotidiana, disfrazada de virtud. El verso “el alma finge con su profecía” no es símbolo ni metáfora inocente: es una condena directa al autoengaño como mecanismo de supervivencia. Y como toda verdad dicha sin ornamento, no admite consuelo ni apelación.
Saludos cordiales.
La Hechicera de las Letras
El dolor que duele
El dolor que calla
El dolor arrasa
El dolor que miente
Ruge bajo crosta
debajo supura
fingida ternura
que termina Hostia.
Pax tibi cara Maga, pax tibi, et lux in tenebrissss
P.D.: mucho me gusto el poema, me pareció muy profundo, enorme poder de síntesis, representativo, una genialidad...
La ausencia es autora, el alma es impostora y la soledad, un exilio elegido. No se trata de un capricho ni de una derrota pasiva, sino de una decisión lúcida ante un horizonte inevitable. Es un exilio con “claro asentimiento”: renuncia voluntaria a las falsas compañías y a la comodidad del autoengaño.
La soledad no es la mejor opción, pero sí la única posible para quien no tolera los simulacros —ni los ajenos ni los propios.
Qui lucem quaerit, se invenit, Poeta Carente.
La Hechicera de las Letras.
Muy estimada y talentosa Hechicera, coincido con vos, pero parcialmente, y te daré razones.
Cuando era joven, empecé a alejarme de la gente tóxica, pensando q era lo mejor. Pasaron los años, y me fui dando cuenta q todos los monstruos q combatía en otros, habitaban también en mi. Cuando descubro esa dura realidad trate de chequearla, de comprobarla, pues era muy difícil de aceptar, hasta q me convencí q así era, q era "ex cathedra". Y desde ese tiempo, empecé a tender puentes en vez de derribarlos, pues casi no tenía diferencia con mis enemigos. Obvio q hay gente con quienes no nos conviene estar, x su enorme toxicidad, o x q nos causaron daños irreparables, pero el resto, si es potable, allí estaré tendiendo puentes con ellos, pues no soy mejor q nadie. No lo digo celebrando, pues quisiera ser mejor q otros, pero en el fondo, se q no lo soy. No pretendo q coincidas conmigo en esta concepción, pues acepto q es muy subjetiva. Solo te la comparto, como experiencia propia, x si quizás en algún momento te sirva de algo...
Poeta Carente tu testimonio es como una roca no por su forma sino por su peso, es valioso como autoconocimiento. El monstruo interior que habita en ti no te hace igual a ellos, muchos de esos tóxicos pasean con correa de seda y lo llaman virtud.
Lo que te separa de la jauría no es ausencia de monstruos —eso sería una ilusión— sino el valor de admitir que el enemigo más temible habita dentro de ti.
Tengo apertura a la diferencias y respeto su existencia, no por falta de convicción, sino porque mi visión no necesita imponerse, me basta con que sea pronunciada.
Qui lucem quaerit, se invenit, Poeta Carente.
La Hechicera de las Letras.
cuando joven estudie LATIN en la UNIVERSIDAD CATOLICA ARGENTINA, odiaba las declinaciones, jaja, hasta q entendí la importancia de este sacro idioma, q me parece tiene la extraña particularidad de transmitir más allá de lo etimológico, cual logos griego ...
Quizás tenga razón, y me este volviendo un patético maestro zen, jaja
Immortalitatem quaere, cara Maga
¡Qué fuerza tiene tu poema! La ausencia y el silencio cobran cuerpo en cada verso. Siempre es un gusto leerte. Saludos cordiales.
Ricardo, no es fácil lograr que algo invisible cobre cuerpo con palabras. Muchos lo intentan, pero se quedan atrapados en lo obvio, clichés y en gestos que apenas digan algo. Que lo hayas percibido indica que logre mi cometido.
Saludos cordiales.
La Hechicera de las Letras.
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