Pabby
En Arauca floreció una voz callada,
pero firme como el río que no se detiene.
Le dicen Pabby,
y con tinta de fuego nos recuerda
que la memoria también respira,
que la pena puede hacerse verso,
y la esperanza, melodía.
Tu pluma es masa que pesa,
en medio de tanta masa que pasa.
Tu palabra no se disfraza:
es río que corre,
es sombra que abraza,
es cielo que llora y después canta.
Martha Patricia,
tu nombre guarda la fuerza de quien agradece
la luz, incluso en la tormenta.
Nos enseñaste que vivir
es mirar hacia adentro
y aún así… invitar al mundo a pasar.
A veces ríes,
y ese “a veces” lo haces siempre,
porque sabes que el amor y la fortuna
no están en el oro ni en la fama,
sino en una taza de café compartida,
en la paz de un poema bien parido,
en la bendición de dejar huella
sin levantar polvo.
Gracias por permitirnos entrar,
por hacernos parte de tu mundo sin llaves,
por revelarnos que la poesía
no es un lujo,
sino un derecho del alma
a hablar sin gritar.
Pabby, que no se calle tu río,
que no se duerman tus versos,
porque en cada palabra que brota de ti,
la vida también se siente viva.
Roberto D. Yoro
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Autor:
Roberto D. Yoro (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 20 de junio de 2025 a las 00:20
- Comentario del autor sobre el poema: FEMINA VIRTUOSA...
- Categoría: Amistad
- Lecturas: 9
- Usuarios favoritos de este poema: liocardo, Mauro Enrique Lopez Z.
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