Está mojado,
el suelo, por el llanto
de las nubes.
Triste fue el lloro,
sin nombre, de los cielos,
en esta tarde.
Color plomizo,
sacaban sus vestidos
y no algodones.
Por eso, el alma,
estaba un tanto triste,
como las nubes.
Pero una brisa,
soplando del nordeste,
dejó esperanzas.
Y así, despacio,
el llanto y la tristeza,
fueron cambiados.
Se convirtieron,
la lluvia por un sol
muy agradable.
También el gris,
de nubes, cenicientas,
quedó en olvido.
Y la sonrisa,
volvió a nuestras pupilas,
mirando el cielo.
Su manto azul
servía de cobijo
al ancho mar.
Ante este cuadro,
"te quiero", al mar, le dije,
"mi mariposa".
Rafael Sánchez Ortega ©
12/06/25
-
Autor:
Pyck05 (
Offline) - Publicado: 16 de junio de 2025 a las 03:24
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 11
- Usuarios favoritos de este poema: Mauro Enrique Lopez Z., Antonio Pais, MISHA lg, WandaAngel, alicia perez hernandez, Texi
Offline)
Comentarios1
hermosas letras enamoradas
me hacen suspirar poeta
con tu dulzura y ternura
gracias por compartir
Y la sonrisa,
volvió a nuestras pupilas,
mirando el cielo.
Su manto azul
servía de cobijo
al ancho mar.
Ante este cuadro,
"te quiero", al mar, le dije,
"mi mariposa”.
besos besos
MISHA
lg
Gracias a ti, Misha.
Abrazos.
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