Auxilio en la Fosa
AUXIIIIIILIOOOOOO...
algo frío me lame el alma,
las tinieblas pesan como lápidas húmedas,
y el aire es un recuerdo que ya no me pertenece.
¿Dónde está el sol que juraron eterno?
¿Dónde los rezos que me sellaron los párpados?
Me despierto…
pero el mundo no.
La muerte fue un bostezo,
un parpadeo de lo eterno,
y yo —
sepultado vivo por los rituales del olvido.
Araño la caja; la madera cede como carne,
mis uñas se deshacen,
pero no hay cielo al otro lado,
solo más tierra…
más silencio…
más nada.
AUXIIIIIIIIIIIIILIOOOOOOO — ¡maldita sea, AUXIIIIIIIIIIIIILIOOOOOOO!
¿No oyen mis gritos que rasgan lo insondable?
¿No tiemblan las ánimas
cuando me retuerzo bajo sus sombras?
Estoy vivo.
Estoy vivo y condenado,
preso de un sueño que ya no duerme,
ni despierta,
solo escarba,
y suplica,
y maldice a Dios en voz baja…
AUXIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIILIOOOOOOOOOOOOOOOO…
no por redención,
es por clemencia…
porque este infierno
aún no me llama.
¡Por Diooooooos… estoy vivoooo…
sáaaaaquenme de aquiiiiííí…
eestoooy viiiiivoooo…
¡ESTOOOOOY… VIIIIIIIIIIVOOOOOOOOOOO!
-
Autor:
William26🫶 (
Offline) - Publicado: 10 de junio de 2025 a las 00:03
- Comentario del autor sobre el poema: Auxilio en la Fosa es un alarido poético desde las entrañas de la desesperación. Explora el horror de despertar en la oscuridad absoluta, atrapado entre la vida y la muerte, sepultado no solo por tierra, sino por el olvido, los rezos vacíos y la indiferencia de los vivos. Es un poema donde la súplica no busca redención, sino que grita por el derecho a ser escuchado. Un descenso claustrofóbico hacia el infierno más íntimo: estar vivo cuando todos creen que no.
- Categoría: Gótico
- Lecturas: 15
- Usuarios favoritos de este poema: Carlos Armijo Rosas...✒️, pasaba, alicia perez hernandez, Pilar Luna, EmilianoDR
Offline)
Comentarios2
se me está poniendo bastante tétrico mi amigo...
Lo tétrico es solo el eco de lo que callamos… y a veces, escribirlo es la única forma de respirar.
Saludos y un abrazo fraterno...
y un abrazo para usted también mi estimado amigo...
Logras con tus imágenes crear esa atmósfera pegajosa, angustiante, uno siente verdaderamente el grito de auxiiiiliiooiii
Qué bella oscuridad. La experiencia de la vulnerabilidad puede ser increíblemente catártica.
Saludos
Gracias por leerme y dejarte arrastrar por esta fosa conmigo. Me alivia, irónicamente, saber que el grito llegó… que la angustia no fue muda.
A veces escribir es desenterrar lo que aún se mueve dentro del ataúd de uno mismo, y si alguien más lo escucha, aunque sea en un susurro, ya no es en vano.
Que la oscuridad nos abrace, pero nunca nos calle.
Saludos sombríos y sinceros.
Saludos William!
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