“¿Qué pasó?” Me dijo la psicóloga de la escuela.
Y yo no pude, no supe decir. Mi garganta sola se encadenó. Ni estar con amigos ayudó.
¿Amigos? Ni eso sé si son, compañeros creo que es una mejor comparación. Hablé y hablé aunque mis palabras tenían una historia vacía, los detalles carecían.
Si lo digo, ¿Qué pasaría?
Temo por mi vida.
No la quitarán, no la quitaré.
Ella como antes no volvería.
Mi miedo de ser diferente es lo que renacería.
No le tengo miedo a la terapia, tengo miedo a dejarme sentir.
No sé cómo dejar salir todo lo que por humillación durante años tuve que reprimir.
“Sensible” “Dramática” “Llorona”.
No. No puedo hablar.
Hablar es sentir.
Y por miedo, no quiero sentir.
-
Autor:
Lin (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 6 de junio de 2025 a las 13:25
- Comentario del autor sobre el poema: ¡Buen día a todos! Un nuevo poema basado en algo que ocurrió ayer, espero sea de su disfrute. ¡Gracias por leer! 🤍
- Categoría: Triste
- Lecturas: 16
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez, Poesía Herética, Mauro Enrique Lopez Z., EmilianoDR, Pilar Luna, JUSTO ALDÚ
Comentarios1
Este texto es una confesión íntima, dolida y poderosa. En pocas líneas, abre una puerta al abismo emocional de alguien que ha vivido el silencio como única forma de sobrevivir. Tiene la crudeza del miedo real, de ese que no mata el cuerpo, pero encierra el alma.
Es un espejo de tantas voces calladas por miedo, por juicio, por esa violencia invisible que etiqueta la vulnerabilidad como debilidad.
Hablar duele, pero callar hiere más.
Saludos,
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.