Mi vecina

gerards21

No hay peor ciega que aquella que no se ve en el espejo desnuda,

con canas, arrugas y teta desinflada, que apunta hacia el suelo,

los dientes de oruga , los ojos borrosos, rendidos al tiempo, ¡derrotados por el viento!, ya todo ha cambiado...

la oruga persiste, tan solo son ruinas y tristes reliquias,

hoy hay telarañas, aquellos rincones que fueron encanto,

esos manantiales, con aguas sagradas, de miel y de menta

y montes frondosos, de bellos cachorros y toros hermosos,

hoy todo está seco, mil canas en pubis,

¡0h musa de infarto y bella doncella!,

con pechos erguidos, tan duros y dulces

y que hoy ya no están y nunca estarán,

recuerdos acechan, migraña y angustia,

su bella silueta, marchó y la dejo,

gloriosas faenas, recuerdos ardientes de musa caduca,

delirios y sueños, ya son pesadillas,

e intenta surgir en tenue arrechura,

intensa mañana lejana y oscura,

ya llega la tarde y ya nada arde,

y en gran sufrimiento la inunda la noche,

la colma de angustia, de llanto y reproche, aquella faena, inmensa locura.

 

  • Autor: titánico (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 29 de mayo de 2025 a las 16:46
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 9
  • Usuarios favoritos de este poema: Mauro Enrique Lopez Z.
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.