Dicen que existe un hilo invisible,
atado al alma, sutil e indestructible,
que une dos vidas por siempre, sin prisa,
más allá del tiempo, más allá de la brisa.
No importa la ruta, ni el viento, ni el paso,
el hilo resiste, se enreda despacio.
A veces se tensa, a veces se esconde,
pero nunca se rompe, siempre responde.
Te busqué sin rostro, sin nombre, sin mapa,
y en cada intento, el destino escapaba.
Mas el hilo, terco, seguía latiendo,
como un susurro que va renaciendo.
Y un día, sin aviso, sin grandes señales,
cruzamos miradas entre tantos males.
Y supe —lo supe— al ver tu reflejo,
que eras tú el motivo detrás de este trecho.
No hay casualidades, todo tiene sentido,
el hilo nos guía, aunque todo esté ido.
Porque en cada punto, en cada desvío,
nunca estuve sola… tú ibas conmigo.
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Autor:
Lorena (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 21 de mayo de 2025 a las 18:15
- Categoría: Amor
- Lecturas: 19
- Usuarios favoritos de este poema: WandaAngel, Francisco Javier G. Aguado 😉, Poesía Herética, Lualpri, ElidethAbreu, pasaba, Mauro Enrique Lopez Z., alicia perez hernandez, Josué Gutiérrez Jaldin, William26🫶, Santiago Alboherna, Limoneyes
Comentarios3
Gracias por ese rojo hilo conductor de tu pluma y tus versos poeta Nalia.
Abrazos.
me gusto mucho el poema y esa metáfora del hilo rojo es genial
DAAM que poema!! Yo adoro la teoría del hilo rojo! (En realida, estoy escribiendo un libro de romance en temática del hilo rojo)
Gracias, me alegro que te guste y me parece muy interesante, espero me dejes verlo en algún momento.
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