El futuro me observa y mi cuerpo se encoje
No es el frío del presente
Pero el derrotero del día a día alimenta torbellinos
La fuerza de la repetición
Se acortan los escenarios
Y todo es bueno y es malo
Alguna vez se cumplió el sueño desde lo imposible
Canto el dolor que reflejan mis ojeras
La voz se quiebra y destila la fortaleza
Voltear el rostro es igual a olvidarse del ahora
Las huellas dejadas son también las que nos permitimos
Renuncié a mí por la vida de los demás
Mi madurez es la de un niño mandado a sufrir las circunstancias
Dónde está la fuerza que debería tener
Dónde la columna vertebral del que me supongo
Lanzado a crear una ilusión destinada a su desaparecer
Lanzado a morir viviendo o vivir muriendo
Esta cobardía siempre buscó su punto final
Una vez más la voluntad huye sin deseos de regresar
Días de tormenta con papeles rotos
Decadencia palpable como todos las hojas
La verdad está ahí
Dulce después de lo infinito de su amargo
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Autor:
KETZAL (
Offline)
- Publicado: 3 de mayo de 2025 a las 21:26
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 12
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez
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