¡Cuidado con el uso de la IA en la literatura!

EdithElviracolquirojas

 

¡Cuidado con el uso extremo de la IA para escribir!

Pues un palmetazo de la crítica puedes recibir.

 

Hay poetas que tratan de sorprender

adoptando un estilo que no es suyo,

haciendo poemas perfectos de la noche a la mañana,

con rimas y palabras estilizadas,

cuando nunca se les vio hacer esas hazañas.

 

Hay incluso escritores que le dan a la máquina de IA un tema 

y les hace todo el libro,

¡Qué estafa macabra!, ¡qué poca capacidad para usar el cerebro!

 

¡Cuidado no vendas gato por liebre!

Que te detectan los detectores de IA

y quedes en ridículo a nivel nacional.

 

Mejor con tus propias palabras y estilo,

teje el manto de la poesía y literatura

y no te engañes a ti mismo

haciendo creer que lo hecho por la máquina es de tu cosecha real.

 

La mente a bailar hecha,

pulsa el botón de la creatividad,

que con IA a nadie vas a engañar,

se nota la rotura en el vestido remendado, ¡hombre, sagaz!

 

Sé genuino con tu obra, no le mientas a tu jardín interior,

puedes usarla para que corrija tu ortografía o redacción,

pero no para crearte una nueva canción

ajena a tu cosecha.

 

No manches el lienzo de la literatura

con tu atrevida y deshonesta acción,

escribe con el alma y corazón

y estudia las técnicas de su elaboración.

 

Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú

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Comentarios +

Comentarios4

  • EmilianoDR

    Gracias Edith, la IA es una herramienta utilitaria, pero nunca puede lograr el temblor de un verso y se debe usar con responsabilidad.
    Saludos cordiales.

  • Alexandra l

    Se nota enseguida el cambio, la perfección, como se puede burlan la intelegencia del lector, es una pena porque al final se engañan a ellos mismos. Gracias por compartir un tema que está en caliente.

    Saludos, feliz día, Alex.

  • karonte

    Amiga y poeta: Elvira

    Tu llamado resuena claro y certero. La poesía nace de las grietas, del temblor en la voz, del pulso humano que la máquina —por perfecta que sea— no puede imitar.
    La IA puede asistir, sí; sugerir, ordenar, incluso brillar en el artificio… pero jamás sentir.
    Porque donde el poeta se desangra, la IA calcula. Donde el poeta duda, la IA decide.
    Y en esa imperfección luminosa, en esa fragilidad viva, está la verdad del arte.

    Estoy contigo: el peligro no está en usar una herramienta, sino en dejar de ser el artesano.
    La pluma no miente cuando el alma la guía.

  • El Hombre de la Rosa

    La sabiduría y el buen versar resaltan en tus bellas estrofas estimada poetisa y amiga Edith
    Saludos desde Torrelavega
    El Hombre de la Rosa



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