Canción desesperada

osmosisj

Mira a través de mi mirada,

huele lo que huelen mis narices,

toca lo que temblorosamente toco

y bebe lo que lentamente se desliza

entre mis dientes y mi lengua

que no es más que el ocaso y la penumbra.

 

Ocaso por encontrarme entre dos tierras

a punto de perderme con la luna

y deseoso de llegar hasta tus piernas

que hoy son el sabor de mi ultratumba.

 

Mas hoy despierta y sin cantos de sirena

pídeme entre dientes, susurrando,

que recorra mil países, mil culturas,

hasta llegar al salitre de tu boca.

 

Salitre que a mí cura las heridas

contrariando a sabios y vetustos.

Y acógeme cual balconada verde

acoge al triste viajero solitario.

 

 

Si nos mordimos como el fuego;

dejando heridas, que sean heridas duraderas

y no quijotescas desventuras,

que hoy yo me muero en el anhelo

de saber que me encuentro ante tu puerta

escuchando tus suspiros y desvelos.

 

Abre de par en par la primavera

y retomemos los meses de la lluvia,

de la lluvia que limpia las angustias

y funde la nieve en la vereda.

 

  • Autor: Vicente Ferrer (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 19 de octubre de 2010 a las 06:53
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 67
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos Novedades semanales


Comentarios1

  • FIDEL HERNANDEZ

    Hermosísimos versos tiene este poema, amigo... Me gusta cómo escribes... Voy aleerte el qu ehas publicado hoy... Seguro que es excelente también...
    Un fuerte abrazo, amigo.



Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.