He presenciado a la vida acabar,
sin prorrogar su partida,
mofándose de los cánones
atribuidos a su dichosa y
misteriosa forma de obrar.
He notado su cortina iridiscente
pavonearse ante mis ojos,
traspasando tintineante,
callada; casi muda…
instalándose en mi angustia.
Por instantes breves
pareciese que algo nos dota
de una iluminadora lucidez,
provocada por el paso irrefrenable
de su aproximación: conforme más se acerca,
mayormente ahuyenta nuestra idea de futuro.
Estoy siendo testigo y participe
de mi propia muerte.
Donde por vez única creo percibir
y comprender correctamente la vida.
Donde por vez única
alcanzo a contemplar
el imperfecto altiplano del mundo.
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Autor:
Joaquín Garcés (
Offline)
- Publicado: 4 de mayo de 2023 a las 05:05
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 9
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez
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