Te quiero por las mañanas,
al mediodía y por las tardes.
Te quiero cuando la noche
se pone su negro tul,
y te quiero en la alborada,
cuando en silencio se lo quita.
Te quiero cuando llueve
y cuando crepitan las arenas
tendidas al sol.
Te quiero con el jolgorio
mañanero de los gorriones,
y en la soledad del silencio
que escapa por mi ventana.
Te quiero cuando imagino
el vaivén de tus rodillas
en busca de mis palabras.
Te quiero cuando me dueles
y cuando redimes las costras
laceradas de mis llagas.
Comentarios2
Es un te quiero cada segundo tras pasados los minutos y estampado en todos lados , que hermoso y sentido poema.
Muchas gracias por pasar por mis letras y por tan bonito comentario.
Saludos
Lindo poema.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.