Un espejo.

Esteban Mario Couceyro



En mi casa hay un espejo

grande y grueso, muy viejo

enmarcado con flores cada tanto

y guarda la imagen que veo.

 

En tantos años, cuantas pasaron

mujeres que se vieron bellas

y cuantos huyeron su mirada

ante la vejez desvencijada.

 

Pero lo mas importante son

las furtivas historias

cuantas impropias expresiones

las traiciones registradas.

 

En ese espejo viejo

en el que me veo reflejado

tras ese mundo nítido

en el que estoy.

 

Como perdido penitente

detrás del cristal

en imagen ausente, grito

pero los espejos no tienen ruido.

 

Ahora veo, una señora

acomodando su pelo

mientras, burlona, lanza un beso

que aprisiono en el cristal.

 

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Comentarios1

  • alicia perez hernandez

    ......Siempre me he preguntado
    mmm si el espejo hablará creo que tiene mas recuerdos almacenados que yo...
    .....
    En tantos años, cuantas pasaron

    mujeres que se vieron bellas

    y cuantos huyeron su mirada

    ante la vejez desvencijada.
    ..........
    A las mujeres nos cuesta ver que hemos envejecido y tu espejo es muy real.

    • Esteban Mario Couceyro

      El personaje, de tanto mirar ese espejo, con la intención curiosa e inquieta de saber lo desapercibido y oculto, finalmente quedó inmerso en el otro lado del cristal, recibiendo esos besos prisioneros, quizá de damas maduras no menos bellas que su esplendor.

      Un abrazo agradecido.
      Esteban



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