Hablando en serio II.

 

Hablando en serio

 

Sintiendo que a lo lejos hay un pueblo que llora,

maldita la mala hora, que llegaron esos pendejos.

En una isla que es puro reflejo de un manso río

en acecho, palpita este pecho mio una lágrima

 en el suelo impío, que se ilumine mi suelo

del desahogo como si fluyera un terrible espanto,

un tormento de cantos en declive, brota la caída del Hanabanilla,

me inclino de puntillas ante el Dios de los desesperados,

que se impongan los inmolados por una tierra de fuego,

donde el pobre guajiro, se llenaba del agua de los cocoteros,

del agua de la lluvia al caer, yo la toqué con el brillo del anochecer,

que cesen las penurias y que brille el sol de noche, el día sea

un eterno flujo romántico desprendido, llegando hasta Bayamo

en coche, ¡ay mi suelo tan mío! de ese placer que a veces

nos despierta al amanecer. sublime y que los cubanos volvamos

la libertad tener. Isla amada, luz de profundos sueños, que tan

ansiosos, siento un amor vanidoso por tanta belleza interna,

luna de plata es tu cabellera de palmas ondeando plenas

de contento en el fuego de la auténtica mulata sandunguera.

 

Si en mi Isla quedaron las memorias enterradas, surcos, tierra,

fango, sol , palmas, cocoteros, ríos, valles, llanuras, beso la creciente

del arroyuelo que me vio nacer, surge el cubano que regando sueños

por dondequiera va adelante y le ves crecer cerca de esa flor que parece

marchita pero está jadeante de hermosura. ¡viva, mi Habana y sus habitantes!!!!,

los de hoy y los de antes! ¡Ron sabor a rumba, Cuba, mi diamante en bruto,

brillo de oro en color absoluto, sigue radiante su caña, tabaco, son,

aguardiente añejado, al que a esa Isla dentro no la siente, es porque nunca ha amado.

 

 

NellyCastell