El pecado nace en tu voz y mi penitencia en tu boca,
¿Qué hago entonces amor,
si tu cuerpo nos llama
y la pasión nos arropa?
Mi alma aclama tu calor
y mis manos
tu figura,
¿Qué tan prohibido es verte,
cuando no me perteneces?
Olvidarte no quiero,
con eso no cuentes.
Te guardaré en mi silencio
y cada que corra el viento
me quedaré callado,
disfrutaré de tus manos frescas
y sabré así, amor,
que siempre vas a mi lado.
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Autor:
Moisés (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 9 de septiembre de 2019 a las 13:36
- Categoría: Amor
- Lecturas: 44
- Usuario favorito de este poema: kavanarudén.
Offline)
Comentarios2
Hermosos versos mi querido poeta del alma.
Profundos, sentidos, plenos de ese noble sentimiento llamado AMOR (escrito con mayúscula).
Un placer leerte
Un fuerte abrazo de mi parte
Kavi
El placer todo mio, un abrazo a la distancia!!
Maravilloso. Me encantó leerte. Saludos poéticos.
Saludos y un abrazo poético!!
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