AJENA

Alek Hine

AJENA

(acróstico soneto con estrambote)

 

 

Ansío el beso de tu boca tibia;

nadando estoy en aguas del deseo...,

ardiendo en pira de febril lascivia

por tu secreto fuego citereo.

 

¡Ay, mis anhelos!: apretar tus manos;

tocar tu faz, morder tus comisuras;

rociar tu flor de pétalos arcanos...,

incentivar tu vientre con locuras

 

concupiscibles de sublime sexo;

in puris naturálibus, el cielo

acariciar temblando, por el nexo

más bello remontarnos en el vuelo

 

orgásmico..., ¡morirnos de placer!;

nacer de nuevo para fenecer;

 

tornar de las cenizas, ¡fénix aves!;

extáticos, al óbito volver...;

surgir después... como fontanas suaves. 

 

FZ

Sunday, March 18, 2007

 

 

  • Autor: Alek Hine (Offline Offline)
  • Publicado: 17 de agosto de 2018 a las 15:33
  • Comentario del autor sobre el poema: ¿In puris naturálibus? Aunque el DRAE virtual ofrece la expresión sin tilde (in puris naturalibus) en su definición de "in púribus", otros diccionarios y fuentes la dan con tilde. Aquí una muestra: "Y termino con una que pueden encontrarse escrita y suele despistar; es 'in púribus'. Originalmente era 'in puris naturálibus', literalmente ‘en puro estado natural’, pero con el tiempo la expresión latina se redujo, quedando en la forma actual, con el significado de: ‘completamente desnudo’. Por ej. ‘Los amantes apagaban la luz antes de quedarse in púribus’." [http://dichosalapalabra.blogspot.com/search?q=in+puris+natur%C3%A1libus]
  • Categoría: Erótico
  • Lecturas: 62
  • Usuario favorito de este poema: Shalom Ferrin.
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos Novedades semanales


Comentarios2

  • Shalom Ferrin

    Esa ansiedad, Franco, esa ansiedad tan propia de la vida. Ojalá ese instante nunca acabara. Qué bueno que ha sido usted el cuerpo que siente y que puede evocarlo de tan llegada manera.

    • Alek Hine

      ¡Exacto! Esa ansiedad suscitada por el impulso genésico (para distinguirla de otros tipos de ansiedad que inevitablemente se nos presentan), ansiedad que, compartida, desemboca en esos liberadores instantes, los cuales desearía uno el poder eternizarlos, o por lo menos hacerlos perdurar bastante más, que no fueran fugaces. Para desdicha del humano deseo (de perpetuidad o de prolongación de tan bellos instantes), la naturaleza, ahorrativa en este caso, nos ha impuesto sus inviolables restricciones.

      Celebro que mis líneas, inspiradas por quien alguna vez despertó tal sentir, hayan llegado hasta más allá de las fronteras de mi cuerpo.

    • Nadie

      Muy bueno. Como A.P. M. se te resista con esos versos es que es de piedra, je je.
      Un saludo, FZ.

      • Alek Hine

        El poema es de hace once años, Osvaldo. Saludos.



      Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.