Y entonces como dos ambulantes,
Cruzamos las miradas,
Recorrimos la calzada,
Y sin más nos alejamos.
Y si fueras tú, aquel,
¿Que la gitana vio en mi mano?
Y si fueras tú aquella,
citada alma gemela.
Como saberlo,
te tuve miedo,
porque eras diferente,
cambié mi rumbo.
Sigo mi camino.
Sigues el tuyo.
Adiós dulce Dulcinea.
Adiós caballero andante.
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Autor:
Lilí (
Offline) - Publicado: 28 de mayo de 2018 a las 18:24
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 59
- Usuarios favoritos de este poema: Edmundo Rodriguez, Anton C. Faya.
Offline)
Comentarios5
Que bonito poema¡¡¡
🙂 gracias!! que bueno que te ha gustado.
Querida Lilì ,
Y en la vida se presentan ,
esa situaciones ,
y sigamos caminando .
Mi cariño , y
Mi càlido Abrazo .
Gracias!! 🙂
Tal vez los amores que se dejan pasar sean los que se tengan que lamentar . Lindo poema.
Gracias!! 🙂
Cómo saber si tú eres el elegido
o soy la que esta equivocada
hay caminos a la buena vida
y caminos al lugar perdido.
Buen poema. Felicitaciones
Con cariño
JAVIER
Que linda respuesta... Muchas gracias!! 🙂
Simpleza en el lenguage y claridad conceptual... Aprecio tu poesia, te felicito.
Saludos...
Muchas gracias!! 🙂
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