Descendió el pie
a la cálida hondonada del zapato viejo
acariciándole la espalda.
Le toma el pulso,
le pulsa la temperatura,
le revisa las venas que le atan la suela,
ciñendo las agujetas se abraza de él
y lo anima a caminar.
(No hay mejores amigos
que un pie y un zapato viejo).
Un día uno de ellos ha de rendirse,
un día uno de ellos ha de aburrirse,
uno de ellos un día ha de morirse.
(Creo que para estos camaradas no habrá cielo.
Si lo hubiera;
desde ahí
el que parta primero
esperará impaciente a su confidente
que añorará su partida en el suelo
-mi incauta elucubración-).
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Autor:
Inexistente (
Offline) - Publicado: 27 de febrero de 2017 a las 15:55
- Comentario del autor sobre el poema: Sala vacía, abanicos apagados, ausentes pies que caminan, mil voces sin escultura. Soledad.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 62
- Usuarios favoritos de este poema: Estanislao Jano, Anitaconejita, rosi12, Diluz.
Offline)
Comentarios5
Buenos amigos, íntimos amigos diría, elucubración nada incauta, profunda, cierta, con un gran mensaje, mas allá de la aparente divagación.
Un cordial saludo, feliz tarde, Alex.
Feliz tarde Alex. Un abrazo.
Original amigo siempre brillas!...Me gustó mucho aún en el último viajé que hacemos es nuestro compañero y buen Amigo..... Excelente!!
Abrazos de Oso
Mi abrazo es también para ti Anitaconejita, Ah! los zapatos viejos.
Gracias por guardar mi poema..
escribes inmejorable poeta
saludos
Elena
Un abrazo Elena (elenas) tu pasar por aquí es grato.
Tema creativo y diferente que lo tratas muy bien, de manera simpática . Un abrazo amigo
Amigo Robles, mis saludos. Grato es su pasar.
Un buen amigo siempre te animará a caminar, aunque sólo con un pie estuviera, muy original tu poema, un gusto pasar a leerte.
Saludos en la distancia.
Thenamora.
Así son los buenos amigos Thenamora. Recibe también mis saludos hasta tu gran Brasil.
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