Conseguir que el sueño se haga realidad
es la máxima aspiración, aunque mi sueño
no sea igual al tuyo, porque los sueños son
como el amor, son libres como los besos
que no son iguales, aunque besemos con la
boca, los sueños no tienen edad ni precio,
el día que dejemos de soñar habremos perdido
la ilusión de vivir, ese día aceptaremos como
premio a nuestro comportamiento, una orgía
con prostitutas escogidas y criticaremos como
inmorales a los indignados de las plazas, que
de repente se han convertido en foros donde
la palabra ha recuperado la transparencia, donde
solo se habla de tú a tú, lejos queda el temor, la
veneración al becerro de oro y a su inmerecida
excelencia.
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Autor:
argantonio (
Offline) - Publicado: 19 de noviembre de 2016 a las 14:57
- Comentario del autor sobre el poema: Este es el discurso de alguien que ha perdido la fe, y que solo le queda la fe en la utopía, que nunca duerme, aunque nunca afortunadamente acierta, porque mientras no se acierta, podemos mejorar la existencia. Algunos de los libros más sagrados, seguidos por multitudes de creyentes fueron escritos en el desierto o en la selva. Afortunadamente los poetas que andan aparentemente descarriados, siguen soñando despiertos.
- Categoría: Sociopolítico
- Lecturas: 1248
Offline)
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