Dejé de leer poesía porque te columpiabas en cada verso
y
la curva melódica
se inundaba
de insolencia.
Dejé de tocarme
porque
solo
sabía
hacerlo
con tus manos,
porque
solo
me
encontraba
en tu cartografía.
Suena tu canción favorita:
el bullicio de la ciudad.
La juventud burbujeante nos hace cosquillas,
el futuro te sube la falda
y
mis caricias
te esfuman.
- Autor: Caramelo de Ricina (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 27 de agosto de 2016 a las 04:10
- Categoría: Amor
- Lecturas: 76
- Usuarios favoritos de este poema: El Silente Vagabundo, Haz Ámbar
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.