Emiliano,
ovillado bajo mi abrazo,
como si fuera un gato,
duerme.
De pronto una cucaracha surca su espalda.
Pero no es una cucaracha;
son mis dedos que lo acarician.
Emiliano sueña.
Ese sueño opresor: va a dejarme, me lo ha dicho.
Nunca más tendré un gato al cual acariciar.
En la dura noche espero un maullido que nunca llega.
Marzo es el mes más oscuro,
pienso.
G.C.
Direc. Nac. del Derecho de autor
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Autor:
GuillermoO (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 12 de junio de 2015 a las 20:17
- Categoría: Amor
- Lecturas: 55
- Usuarios favoritos de este poema: Alejandrina, pani.
Offline)
Comentarios2
ooh me hizo pensar en mis dos gatas y me dio penita imaginar cuando se vayan.
cariños de Alejandrina.
Tengo un gato y una gata. Pero ya he tenido otros que se han marchado...
Un abrazo.
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