Me despertabas a gritos por las mañanas
para ofrecerme una ritual taza de café caliente
que abrigaba, como cuando moré en tus entrañas
era una semilla de carne, un espíritu silente.
Me extrañaste en la ausencia del que quiso volar
los años iban marcando tu terso rostro, en tanto
mi adolescente alma intentó hablar y cantar
ante la tragedia y la felicidad, la risa y el llanto.
Aún sigues como si nada ha pasado, estás vieja
pensando en mí, siempre preocupada en nosotros.
Tu amor es constante, es un sol que nunca ceja
que alumbra más allá de la carne, de los escombros.
Como un pedazo de tierra que guarda tanta energía
sustentaste mi ser con polvo humano y divino
ya no querré ni podré cantar una futura elegía
me acompañarás en silencio, hasta el final del camino.
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Autor:
lapiedraviene (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 12 de mayo de 2014 a las 00:16
- Categoría: Fecha especial
- Lecturas: 69
- Usuarios favoritos de este poema: la negra rodriguez, Alejandrina, santos castro checa.
Offline)
Comentarios5
HErmos pema paisano , siempre tanm priofundo y mostrando la aprte mas hunmana de ts sentimientos.
besos.
Gracias estimada.
Murialdo...
hoy tus letras brillan con el color del amor
Un abrazo
La madre es capaz de despertar en nosotros el amor, como el sentimiento más puro. Gracias por el comentario y saludos.
HERMOSAS PALABRAS PARA ESE SER ESPECIAL... QUE SIEMPRE ESTARÁ PRESENTE EN NUESTRA VIDA
FELIZ INICIO DE SEMANA
ABRAZOS DTB
Felicidades para tí si eres madre. Gracias por el comentario.
Las madres perdonan tanto, que nosotros los hijos, muchas veces no sabemos apreciar. Sus versos son hechos con un fuerte contenido emocional que lo hacen muy bellos.
Un cálido saludo y buena semana.
Gracias estimada.
Un merecido y tierno homenaje a ese ser tan divino que Dios puso sobre la tierra, tan llena de amor, tan colmada de ternura.
Abrazos, hermano...
Gracias por el FAV y por tu comentario. Un abrazo hermano.
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