Soliloquio del mendigo

Isaac Amenemope

Y que haré ahora que olvide traer mi chuletario de poesía herrumbrosa, que hare con todo este amor que renace, que me enseña a comenzar otra vez desde cero… aquí está la jeringa con la que pincho mi cabeza para dejar de creer por un ratito que definitivamente estoy muerto, q2ue existes,  o brindarme una jornada de locura, después de disfrazarme con los arapos de los viejos, para recorrer las calles, y dormir bajo un banco en el suelo; uno y dos son tres, los pensamientos que quisiera, y no puedo esconder, ,dos y tres son cinco, ahora estoy en paz, pero soy mendigo. Cinco y cuatro son nueve, siento de los pies a la cabeza la energía que me mueve.

Siempre a punto de esta manera de encontrarme así con mis divinas manos libres de trabajo, sucias de tanto repartir poemas, extasiadas de sacrificar cosas, curtidas de superficial soltura. Ya no necesito taparme los ojos para no ver, mi suerte ha sido hallarte sin haberte buscado, mi muerte es haberte hallado, amarte y no poder estar contigo.

Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos


Comentarios2

  • jorgeluisotero

    *** PENSAMIENTO ***

    Muy interesante esta prosa de amor.
    es un placer llegar y ser recibido,
    soy almirante de los versos cautivos
    porque en ellos encuentro calor.

    Sin buscar encontré un destino
    sin hallarlo, me siento su dueño,
    soy como ése mendigo sin sueño
    que busca todos los días un camino.

    *** J.L.O ***

    Me gusto pasar por tu portal. te felicito y deseo triunfos en tu vida.
    mis saludos.

  • Marellia

    Besos mi querido, sabes de sobra lo que tu poesía me trasmite.



Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.