HISTORIA DE LA PEÑA DEL CABALLAR Y LA XANA DEL CASTIELLO

luisa leston celorio


AVISO DE AUSENCIA DE luisa leston celorio

Os saludo amigos.
Intentaré entrar más a menudo aunque no sea tanto como deseo.
Por razones de problemas visuales no puedo estar en el ordenador, por esa razón no podré hacer muchos comentarios, pero abrí para intentar comunicarme poco a poco con todos ustedes porque os hecho mucho de menos.
Un abrazo.



En una tarde de verano un joven galán se paseaba a lomos de un hermoso corcel por el Monte Castiello cuando escuchó un triste canto que salía de entre unas verdes zarzas. Inquieto por letras tan clamorosas se apeó de su montura y buscó insistentemente hasta que encontró entre los matorrales la entrada de una cueva. En ese momento recordó como desde niño había escuchado a sus mayores decir que en aquel acantilado había una cueva muy profunda donde moraban las xanas. Mientras meditaba sobre sus pensamientos seguía buscando y rebuscando a ver si salía de aquel lugar aquellas letrillas entre sollozos que había escuchado. Nada ni a nadie vio, así que de nuevo se encaminó hacia su blanco caballo que pastaba a la orilla de la empinada senda que conducía hasta la playa del Aguilar. Apenas se había subido a la grupa cuando a sus oídos llegaron de nuevo unos profundos suspiros que le encogieron el corazón, entonces decidió que no se iría de allí sin descubrir quién era la persona que tanta tristeza desplegaba. 
Una y otra vez insistió en buscar y rebuscar por entre los floridos arbustos y rocas que adornaban el hermoso Monte del Castillo, al no encontrar a la apenada criatura que canturreaba mientras sollozaba con tanto desconsuelo volvió sobre sus pasos y se encamino de nuevo hacia la cueva. Se adentraba lentamente cuando a lo lejos descubrió como el centelleante Sol penetraban por un pequeño agujero iluminando aquel lugar que aparentemente parecía tan siniestro. Aparentemente, ya que lo que estaba descubriendo era algo irreal. ¡No podía ser que aquella beldad, de blanca y suave piel, de cabellos dorados que se asemejaban a los fulgurosos rayos del astro rey, fuese real. 
La joven criatura limpiaba su rostro con un bonito pañuelo blanco como la espuma de las olas marinas. En su dedo lucía un dedalito de oro y sobre su regazo unas tijeritas de palta. Un bastidor de fina nácar sujetaba un paño de primorosa seda que dejaba entrever diminutas estrellas bordadas con finos hilos dorados y plateados. 
El joven con delicadeza se acercó a la jovencita mientras le preguntaba:
-Preciosa criatura ¿por qué esos desconsolados lamentos? ¿Por qué esos ojitos tan hermosos como luceros derraman lagrimas tan amargas? Si bien, sobre tu delicado rostros parecen perfecto brillantes, me apena verte tan dolida.
-¡Oh caballero, qué desdichada me siento!
-Y, ¿cómo puede ser eso siendo joven y hermosa? 
-De poco me sirve mi hermosura si tengo que vivir para siempre oculta en esta cueva sin poder disfrutar de este paisaje tan hermoso que me rodea, ni compartir mi vida con otras personas. 
-¿Que razanos te lo impide? Pregunta muy extrañado el joven.
-Mis padres me castigaron de por vida a estar aquí enclaustrada por no haber sido cuidadosa.
-¿Tan grave fue tu error?
La joven se encogió de hombros mientras murmuraba entre dientes: 
-Me han pedido que tuviese cuidado con el ovillo de hilo que me entregaron para hacer mis labores, pues les había sido muy costoso hilar los finos rayos del Sol, pues él no se dejaba fácilmente arrebatar sus preciados tesoros, y por un descuido lo perdí.
-¿No hay manera de que te perdonen, bella muchacha?
-Sí que la hay, pero es muy arriesgada.
El joven se quedó sorprendido ante comentarios tan extraños, entonces cayó en la cuenta de que debía estar en presencia de una preciosa xana, y sin más preámbulos se ofreció a ayudarla a salir de aquel lugar. 
-Dime, ¿qué he de hacer para darte la libertad y dejes de sufrir para siempre este castigo tan penoso?
-Tendrás que bajarme a dar un paseo por la playa a lomos de tu caballo, pero no puedo poner ni un pie en el suelo, ni una mota de arena puede tocar mi piel.
Sin más pensarlo el galante joven la cogió en brazos y la subió sobre la grupa de su corcel y con mucho cuidado comenzó a bajar hacia la playa. Lentamente iban alcanzando el arenal cuando de momento se ocultó el Sol y una ráfaga de viento comenzó a hacer remolinos sobre este. Fue pronto el joven en cubrir con una cobija a la jovencita para librarla de que ni una mota de polvo la tocase. Así lo había conseguido, pero cuando llegaban al centro de la playa un tremendo rayo cayó sobre en arenal y de seguido un descomunal trueno retumbó entre las altas rocas. Como resultado el joven se quedó muy aturdido y soltó el ramal del caballo, a la vez el animal se alzó de patas y la joven xana se cayó de bruces. 
Ante el asombro de la joven xana el corcel junto a su apuesto jinete se quedaron petrificados formando una hermosa roca a las que las gentes del lugar bautizaron con el nombre de La Peña del Caballar.
La xana salió atemorizada hacia la profunda gruta donde según cuenta la historia permanecerá bordando día tras día hasta que sus padres tengan a bien el desencantar al caballo y su jinete y que este de nuevo intente rescatarla. 

Autora: ESCAPITINA_- LUISA LESTÓN CELORIO -
REGISTRADO- TOMO- MIS RELATOS (2011) 



El relato está basado en la mitología asturiana.
Las xanas son una especie de hadas que les gusta enamorar a los hombres de manera engañosa.
No son brujas, pero tampoco hadas bondadosas. 
Bien en los ríos, fuentes o acantilados. Salen en la noche de san Juan a danzar en las arenas de las playas. 
Son de una belleza extraordinaria, también les gusta ocultarse entre la niebla para juguetear con los mozos más hermosos del lugar y atraerlo hasta sus moradas.

En este caso salvo yo añadí a la historia de la Peña Del Caballar una narración sacada de mi imaginación jugando con una de las muchas narrativas que hay sobre las Xanas.


LA XANA 
Son seres de gran belleza pequeñinas de piel blanca, tienen grandes cabelleras de color dorado, y suelen estar desnudas o cubiertas con un fino velo de seda. Viven en cuevas donde nacen los manantiales o en las orillas de los ríos, y en cuevas cerca del mar.
Durante el día se dedican a tejer con hilos de oro y con peines del mismo metal arreglan su pelo. Dicen que su belleza hechiza y si un hombre la ve, nunca más la puede olvidar.

Utiliza dulces canticos para conseguir atraer algún humano. Le hechiza y le hace traer comida y cosas que ella no puede conseguir, ya que apenas puede alejarse del agua. A cambio ella le ofrece numerosas riquezas. Estos hombres se harán ricos pero nunca lograran ser felices ya que hechizados por la Xana deberán acudir cada vez ella lo quiera.

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  • Autor: ESCAPITINA -Luisa Lestón Celorio (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 4 de agosto de 2013 a las 19:07
  • Comentario del autor sobre el poema: Mientras escribía este cuento basado en la mitología astur, en este caso más concreto en el pueblo de Muros de Nalón y su playa del Aguilar, irremediablemente me recordaba de mi abuela materna Carola, ella nos deleitaba o en ocasiones nos atemorizaba con historias que ahora bullen en mi mente y de manera irrefrenable salen de mi humilde pluma. La música del vídeo pertenece al folk asturiano, en este caso describe el baile de las Xanas. La Foto es de la Peña del Caballar, o mas bien dicho,esa peña es el apuesto caballero y el corcel encantados.
  • Categoría: Cuento
  • Lecturas: 500
  • Usuarios favoritos de este poema: matteo, Lucia Pastor, miriam quintana.
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Comentarios5

  • macridi

    Me ha encantado tu preciosa historia. Qué lindas leyendas poseen en tu tierra, y qué imaginación prodigiosa para crear tienes amiga! FELICITACIONES POR TU FANTÁSTICO RELATO! Tu amiga Cristina.

  • luisa leston celorio

    Gracias Cristina, eso de la imaginación ha de venir de familia, jejee, recuerdo como mi padre en sus buenos tiempos nos contaba el mismo cuento de mil y unas maneras distinto.
    Sí, es cierto querida, la mitología da mucho de sí, y en el caso de Asturias hay un sin fin de personajes mitológicos extraordinarios, dignos de escribir fantasiosas leyendas.
    Me encanta la mitología, de cualquier lugar y tiempos, pues si se escarba en las leyendas siempre se ve que están basadas en algo real o creencias de los hombres quizás llevados por temores a lo desconocido que hoy ya tenemos superado.
    Un abrazo muy fuerte amiga.
    Luisa

  • Lucia Pastor

    Mi querida amiga Luisa, me encanto conocer esas historias de antaño de tu tierra, y que como en toda tierra tienen esas leyendas que nos cautivan, y que fueran vividas o no son mágicas, me encanto ..te felicito ...abrazos mi querida y gran escritora...abrazossssss

    • luisa leston celorio

      ¡Verdad que las leyendas son cautivadoras? Me encantan, y aun más me gusta darles nueva vida ya que pasa con ellas como con las operas, zarzuelas,... siempre se cantan las mismas, como si se agotasen los argumentos. En este caso no es inventar figuras mitológicas, sino darles vida para que no queden en el olvido. Parte de esta historia es de mi cosecha, por supuesto, la xana y sus tradiciones pertenecen a los mitos que pasaron de boca en boca desde tiempos inmemoriales.
      Un abrazo amiga
      Luisa

    • lore58

      Me ha encantado la historia. Me gustan las historias de hadas y las leyendas de los pueblos. Un placer leerte.

      • luisa leston celorio

        Gracias Lore, es una pena que se mueran, que los niños de hoy no tengan ni remota idea de las leyendas e historias de sus pueblos.
        Un abrazo y gracias por estar ahí
        Luisa

      • miriam quintana

        Toda una dama de las letras luisa
        me encanto leerte cuidate mucho
        abrazo con mucho cariño y bendiciones.

        • luisa leston celorio

          Gracias amiga Mirían.

          Un abrazo de corazón
          Luisa



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