Qué difícil es amar al natural
despojándonos de tantos caminos
de la ropa tan preconcebida
de esos temores artificiales.
Que natural es cuando el amor florece
el cuerpo tomando territorio
en la avidez de la amante.
Que dulce es sentir los muslos
de tibia provocación
de la amada o no de la amada.
Y la lengua que recorre
por territorios lunares
porque la piel tiene sabor a mar.
Que temeridad es sentir
las manos llenas de senos:
La concavidad biconvexa del sexo.
¡Qué milenario ritual!
¡Qué agonía de plena vida!
Y una vez más tenemos
la única posibilidad de matar
a esa dulce muerte
y huir de ella como huimos
del universo que se nos viene encima.
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Autor:
lapiedraviene (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 4 de agosto de 2013 a las 12:52
- Categoría: Erótico
- Lecturas: 105
- Usuarios favoritos de este poema: Consuelo Soto, jairodelacroix.
Offline)
Comentarios4
No sé qué será lo que viene, pero en el mundo un cambio debe existir, un abrazo poeta.
Nely, gracais por comentar y leerme. Coincidencia o no en tu avatar veo dos amantes.
Magnífico y erótico tu tema, poeta (¡cuánto tiempo sin visitarnos!...)
Continúo en página.}Saludos.
Hugo Emilio.
Un gusto saber de ti, estimado Hugo. Pasaré a leer tus últimos escritos.
Un abrazo de sincera amistad.
Un abrazo, poeta. Te espero.
Que difícil amar al natural es cierto... pero es la forma más bella.
Te abrazo Murialdo
Amigo, me gusto mucho tu poema, sin embargo, a riesgo de parecer ignorante, podrías explicarme que quisiste decir en la ultima parte "huir de ella como huimos del universo que se nos viene encima"?
Un saludo.
Gracias Jairo por leerme. Me referíaa esa dulce muerte. Por ahí hay teorías que dicen que el clímax se parece a una pequeña muerte.
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