Un cuento, para una mujer llamada Amiga!

Para una Mujer, llamada “amiga”!!! 

¿Hola?,…, ¿cómo estás?,…, ehhh!,  sí!, a vos, Mujer!!!, me dirijo, Yo, el  “Hombre Invisible”, ex muñeco maldito, o quizás mejor dicho, como alguien me supo corregir,…, : maldito, nó!!!, a lo sumo ha de ser “maligno”, bueno no importa, la cuestión que hoy 20 de Julio de este frío 2010, decidí escribirte, o mejor dicho contarte un sueño, que quizás nació de una oración de Don Mario escrita en uno de sus libros, (“Letras de Emergencia”), obviamente obsequio tuyo.

 Se trata de sus reflexiones “literatura de militancia política”, y en algún lugar leí: “Yo me violé ala Gioconda”,…, frase que tal vez fue la llave del candado de mis sueños, los cuales intento plasmar en estos momentos, claro está, que como son sueños nunca, los mismos se acercan a la realidad de los soñado, puesto que generalmente, uno casi siempre en los brazos de Morfeo es un “antihéroe”,

 Siempre se queda sin balas, o la espada en el preciso instante de la acción, se dobla, se rompe o se cae, y jamás uno logra terminar el acto sexual  con la mujer soñada, ya sea porque, alguien en ese preciso instante te llama por teléfono, o porque en ese preciso instante, el despertador te indica “up” baby o simplemente porque en ese preciso instante la imagen de la bella se esfuma y tú te quedas como cuando “vinimos de España”,…

Sea cual sea la historia, no importa, pero lo que sí creo es que te preguntarás (¿Porqué me escribe este tío?, justo cuando ya lo había olvidado, o al menos no lo recordaba),  la respuesta: No la sé !!!,

Será que tengo ganas de joderte,

Será porque aunque no lo creas te quiero,

Será porque te extraño,

Será porque es el día del amigo

y pronto muy pronto, el  1º de Agosto venidero has de entrar a ser “muy mayor para mí”, o 

Será porque tan solo tengo ganas, el motivo no importa, empecé a garabatear letras, se formaron palabras, se hicieron frases y luego con un verbo inicié oraciones, tratando de tan solo recordar, en particular los pensamientos “pecaminosos”, bueno es un decir, porque soné, soñé y soñé:

 Soñé que bailaba con Diana, (cuando Carlos dormía, y el Jeque no existía), al compás de valses vieneses que  mágicamente se entonaban, y se sucedían sin prisa y sin pausa,…

 Soñé quela MadreTeresa, cual pordiosero de Calcuta, me cobijaba entre sus brazos para darme la digna muerte  ó muerte digna, de los pobres…

 Soñé que le extendía mi mano ”abierta” ala Sra.Indira, para estrechar la suya, pues ella fue la responsable de “nunca se puede dar la mano con el puño cerrado”…

 Soñé que acariciaba los senos a  Madame de Pompadour,  cuando bebía en una fina copa de cristal el burbujeante y dorado vino de los reyes…

 Soñé que apasionadamente hacíamos el amor conla Gioconda, y que su enigmática sonrisa se transformaba en llanto, en risa y  que sus escondidos ojos se cerraban de placer…

 Soñé que Edith Piaf me cantaba “Bajo el cielo de París”, y Yo superando a Ives Montand, la enamoraba con “Hojas Muertas” y al pronunciar el nombre de Ives, pasaba a ser el actor de la película “Estado de Sitio”, claro,…, con  un final distinto…

 Soñé que era Yo el caballero andante que besó a Cenicienta y que envuelta en sedas negras, se abrazó junto a mi pecho, pero no pude amarla, pues ya la había amado hacía mucho tiempo…

 Soñé que Dalí, Picasso, Van Gogh,  Monet,  Renoir copiaban mis retratos, y que Mozart, Beethoven, Vivaldi,  Strauss, robaban el pentagrama de mi vida…

 Soñé con rostros difusos que me supieron amar y tal vez no amé,  intento recordar sus nombres, un espacio vacío y un silencio de tumbas me corroe…

 Soñé que en mi harén Marilyn, Zsa Zsa y Rita, bailaban para mi como en “Las mil y una noches”, y juntos estábamos en un macizo templo de oro que hacía opacar la belleza del “Templo al amor” o “Lágrima en la mejilla del tiempo”, sí el Taj Mahal…

 Pero “sabes una cosa”, también soñé con vos!!!,

 Soñé que un manto de “rosas rojas sin espinas”, cubría nuestros cuerpos, desnudos, sedientos, abatidos,

 Soñé mil fantasías,

Soñé mil sueños,

Soñé que el tiempo retrocedía hasta nuestra juventud,

Soñé con el universo que se debatía en un dilema, romper o no romper la armonía infinita de los tiempos, ya ves Mujer, soñé, soñé y soñé,…, y en esos sueños volví a ser feliz. !

Finalmente soñé que en este día del amigo tus amigos sin lugar a dudas te habrán saludado como yo no pude,  o, tal vez,... "no quise",…

Jorge Fontanero

           20/07/2010