Flores marchitas
solitarias
arrojadas.
Dioses entre las sombras,
seres sin rostros,
todo sobra.
Sombras que aman,
locuras sin aliento,
el silencio de los muertos,
los besos de la bruja,
todos caminan,
nadie puede escuchar
el llanto de ese niño,
la madre no despierta,
todo gira.
¡Silencio!
No hay agua, tengo sed.
El calor atormenta,
llegaron los de siempre,
una vieja grita,
todas las madres se lamentan,
un niño llora,
todos mueren.
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Autor:
Gerardo Barbera (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 22 de septiembre de 2012 a las 01:10
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 66
- Usuarios favoritos de este poema: matteo, El Hombre de la Rosa, Joseph Mercier García, CARMEN.
Offline)
Comentarios5
Muy bueno! vertiginoso y tremendo, felicitaciones! abrazo.
Una grata lectura de tu triste y bello poema amigo Gerardo
Saludos y amistad
Genial lectura. Trepidante narración de hechos en versos desenfrenados. Me ha encantado, va para favoritos y aquí seguidor fiel tuyo que soy. Me alegra haberte leído y espero deleitarte por igual con mis escritos. Recuerda que siempre puedes encontrarme en www.josephmercier.es,
Un abrazo,
Joseph
Tremendo poema repleto de intensidad y belleza. Un placer pasar por tus versos. Un beso
Nunca creí que me gustaria un jarro de agua fría, ese sentimiento me gusta porque lo reconozco, porque creo entender aunque quizás me equivoque. Fascinante.
Un saludo.
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