Cuentos que fueron llevados al cine

Seguramente muchas de las películas que te fascinan fueron primero preciosos relatos. Sí, aunque el cuento sea el género menor ha ofrecido fabulosas historias que enriquecieron nuestra vida no sólo a través de las palabras sino también de las imágenes.

Algunos cuentos para ser llevados al cine tuvieron que ser estirados o transformados, a fin de poder contar con un determinada extensión que justificara el cambio. En este artículo te presentamos algunas pelis famosas, que antes de volverse populares en la pantalla grande, fueron preciosos relatos. ¿Las vemos juntos?

De las palabras a las imágenes

Una de las características fundamentales de los cuentos no es la brevedad, sino la capacidad de decir lo fundamental, es decir que en él sólo se puedan encontrar hechos, descripciones y espacios imprescindibles.

En un relato el autor no tiene la libertad de «irse por las ramas» cosa que sí ocurre en las novelas, por eso llevar un cuento a la pantalla grande es todavía más trabajoso; no sólo exige hacer el guión (porque por si no sabían la forma en la que se escribe una narración es absolutamente diferente a la de un guión de cine o teatro) sino además repensar muchas cosas, imaginar aquellos espacios que no se han descrito y a los personajes… Y, en muchos casos, agregar escenarios y personajes. Por eso, no hay que despreciar el trabajo de estos guionistas. Por otro lado, ese traspaso entre las palabras y las imágenes requiere una visión de las historias absolutamente amplia, por lo que no es trabajo para cualquiera.

Brokeback Mountain

Una de las películas que más público ha conquistado seguramente es «Brokeback Mountain» y se basa en un cuento de Annie Proulx. Esta escritora, nacida en Connecticut en 1935 es conocida por sus relatos de tipo costumbristas, ideados en un entorno rural. Su obra se encuentra incluida en el «realismo mágico», dada la delicadeza con la que la autora describe los paisajes, de una forma que roza la fantasía; de todas formas, su estilo directo y sarcástico le permite llegar a los lectores y cautivarlos con sus historias.

«Brokeback Mountain» es uno de sus relatos más famosos en el que se relata una conflictiva relación amorosa entre dos chicos en un pueblo de Texas, absolutamente gobernado por principios primitivos y donde la libertad de expresión no es una posibilidad.

Estos dos jóvenes se conocen mientras cuidan un rebaño de ovejas en la montaña. Se enamoran y tienen una furtiva relación; después cada uno continúa con su vida heterosexual aunque lo que en realidad desean es volver a estar juntos. En la película se recrea la historia a la perfección, pudiendo además analizar las consecuencias que puede tener la homofobia en la vida de los homosexuales.

Si deseamos llegar más a fondo, podemos pensar también en las consecuencias de la represión o la imposición de ciertas reglas y mandatos, lo nefasto de privar a alguien de su libertad, de amar a quien quiera, de vivir con quien quiera, de desear lo que sólo él sabe que puede hacerlo alcanzar la felicidad.

Stephen King y Fitzgerald

Un autor cuyas obras han aparecido reiterativamente en el cine es Stephen King; sin ir más lejos una película de terror que tuvo un impresionante éxito, «Los chicos del maíz» provenía de un relato absolutamente pequeño, al que se le agregaron muchos elementos que no existían, los cuales en vez de arruinarlo enriquecieron absolutamente la historia.

En esta historia, acaecida en un pueblo de Nebraska (lugar ficticio), los protagonistas son un grupo de jóvenes que son visitados por un ser demoníaco que los instiga a asesinar a los adultos del pueblo porque dice que es la única forma de asegurar que la cosecha de maíz de buenos resultados, a través de crueles rituales.

El propio Stephen King colaboró con la adaptación de su cuento, sin embargo quien tuvo mayor influencia a la hora de traspasar las palabras a la imagen fue el guión que desarrolló George Goldsmith, con un grado de violencia y una estructura más propicia para el éxito taquillero. Posteriormente a esta (gracias al impresionante éxito que tuvo) surgieron otras películas que pueden considerarse secuelas de «Los chicos del maíz».

Y ¿quién de ustedes no ha visto o ha escuchado hablar sobre el film «El curioso caso de Benjamin Button»? Muy bien, les comento que esa película de David Fincher también se encuentra basada en un relato, escrito por F. S. Fitzgerald y que lleva el título homónimo.

Es una historia llena de emoción donde un hombre «nace en extrañas circunstancias» que hacen que su proceso evolutivo vaya al revés que en cualquier otra persona, es decir que al nacer se ve como un hombre de 85 años y a medida que pasan los años rejuvenece cada día un poco.

Ésta no es una mera historia de curiosidades, a través de ella puede realizarse un profundo análisis sobre el paso del tiempo, la presencia de la muerte acechando nuestra vida, y por supuesto sobre esa obsesión humana de mantenerse eternamente joven.

Breve conclusión

Como éstos existen muchas otros cuentos que han sido llevados a la pantalla grande, muchos de los cuales han logrado rotundos éxitos.

Pese a que muchos insisten en denominar al cuento como el género menor, el trabajo de crear un cuento no es para nada despreciable; el autor debe tener un dominio importante del lenguaje que le permita utilizar la menor cantidad de palabras posibles para expresar aquello que desea de una forma literaria, atractiva y atrapante.

Sinceramente admiro enormemente la labor de los cuentistas, creo que se puede ser un buen novelista con poco (no un gran novelista, claramente) pero para ser un buen cuentista se necesita mucho más, y es complicado conseguirlo.



Debes estar registrad@ para poder comentar. Inicia sesión o Regístrate.