A través de Twitter se hizo posible la participación de Eduardo Varas Carvajal en la sección de Poemas del Alma que se nutre, cada semana, con una entrevista breve respondida en no más de 280 caracteres.
Este ecuatoriano que en la mencionada red social es seguido por más de siete mil usuarios lleva varias temporadas demostrando sus habilidades literarias. Además, es periodista y reserva algo de tiempo a cultivar su faceta como músico.
Opciones para descubrirlo como escritor y apreciar su producción, hay muchas. Algunos elegirán darle una chance a “Los descosidos”, mientras otros pueden experimentar interés por “Las tres versiones”. “Esas criaturas” y “Faltas ortográficas” también son fruto del trabajo creativo de este autor que, meses atrás, dijo presente en la edición 2022 de la Feria Internacional del Libro de Guayaquil.
– ¿Qué enseñanzas y reflexiones acumulaste tras haber creado “Las tres versiones”?
– Dos, en definitiva: confiar absolutamente en que la ficción es el terreno en el que siempre me quiero mover y, por otro lado, dejarme llevar por los caprichos que aparecen durante la escritura, para ver dónde me llevan.
– ¿Cómo es, desde tu punto de vista, un buen libro? ¿Cuáles son sus rasgos distintivos?
– Uno que no quiero dejar de leer. Siempre la lectura por encima de todo. Ahora, para mí, el ritmo es importante y lo extraño y curioso que puedo encontrar ya sea en la historia, en la estructura o en el mismo estilo.
– De los relatos que integran “Faltas ortográficas”, ¿cuál es el más significativo para ti? ¿Razones?
– Sin duda, el primer relato del libro, “Prólogo”. Porque empezar a escribirlo me sacó de un momento de absoluta tensión personal y, al final, es una de las pocas cosas que he escrito que me hace sentir orgulloso. Como lector, ese cuento tiene toda la extrañeza que me encanta.
– ¿Qué etapa o cuestión fue la más complicada durante el proceso de escritura de “Esas criaturas”? ¿De qué modo trabajaste o a qué apelaste para superar los obstáculos?
– Fue difícil contar espacios de terror, compaginarlos y equilibrar el horror de ambos. El primero, sobre casos de abuso sexual en escuelas y colegios en Ecuador. El segundo, desde seres de fantasía que pueblan la novela y que, con cierta monstruosidad, intentan hacer justicia.
– Si no fuera producción tuya, ¿“Los descosidos” ocuparía un lugar especial en tu biblioteca? ¿Motivos?
– Probablemente no. Siendo mi primera novela, encuentro muchos problemas y “errores” en ella y prefiero dejarla a un lado. No es vergüenza, es pudor de escritor. Pero bueno, la hice, se publicó, alguien la leyó. Prefiero dejarla a un lado y ya, pensar en el siguiente libro.
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