Mujer

Palabra que encierra
la vida,
la tierra,
la cima,
la fertilidad
y en los ojos del hombre la estima
el desvelo,
el gesto,
la felicidad.

Mujer...
que engrandeces la especie
con tu seno receptivo,
dador de nutrientes y el saber,
génesis y matriz del divino sexo,
complemento del universo
y del hombre dispuesto.
Mujer...
sos la libertad de dar vida
y la diva de la especie.
No hay nadie que se precie
tanto como madre, hermana,
novia, amiga y compañera.
Cualquier credo, religión o raza
de la divina condición
de parir eternamente
con devoción y templanza,
los hombres que un mañana
poblarán la Tierra de esperanza,
indefectible e inexorablemente.
Con un rótulo de amor en la frente
soy mujer y madre orgullosa,
por lo tanto es mi deber contenerte
y cambiar espinas por rosas.

Hay mujeres que parieron
grandes hombres de la historia,
y hay otras que forjaron con victoria
el curso de su destino,
pero con espalda quebrada me inclino
ante aquellas que no se doblan
en el roble de su camino.
Son las que mi alma honra,
las que solo ven un horizonte con rumbo fijo:
las que de la harina hacen milagros
para alimentar a sus hijos.

Dama de ternura
paz,
alegría,
riza,
llanto,
orgullo y virtud en sabiduría
aveces dulzura,
otras cuantas de hierro.