Fijo mis pies en la roca maciza
que eterniza mis ansias y mi fuego
mientras recoge una mar distinta
las olas fenecidas de los ruegos.
Detengo ahora el paso vagaroso
anclado en la vida enquistando sueños
y rompo el andamiaje entre los fiordos
rampantes, y entre témpanos me duermo.
Entrego mi barca en la usual orilla
dejo los muelles de áspid y polilla
y alzo un vuelo sobre el final concierto.
Madera del navío y piel comida
serán, mientras yo en la roca encendida
a la luz perenne y al vivir asciendo.
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Autor:
Latino (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 18 de febrero de 2011 a las 00:28
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 62
- Usuario favorito de este poema: GITANA DULCE.
Offline)
Comentarios4
MUY BELLO POEMA HAS TRAIDO AMIGO MIO DEL ALMA,
ES UN PLACER PASAR A LEER TU POEMA.
ABRAZOS DE GITANA.
Madera del navío y piel comida
serán, mientras yo en la roca encendida
a la luz perenne y al vivir asciendo.
Este poema tuyo hace resucitar emociones que parecían dormidas, muy hermoso amigo querido, me dio placer volverte a leer, abrazos en la diatancia.
Muy bueno, con el toque de la buena poesía que siempre nos dejás como un regalo especial.
Querido Latino, un placer leerte, es un nivel de poesía que no es común.
Un beso grande
BELLA ENTREGA ,TE ABRAZA STELLA
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