¡No eres el único protagonista!

Alejandra G. C.

 

Escucha lo que tengo que decir,

a veces sueño que careces de garganta

y que tus oídos son tan grandes como tu egoísmo...

 

¿Sabes que tu indiferencia es mi agonía?

¿Sabes que no eres el único protagonista?

 

Escucha lo que tengo que decir,

eso te hará más grande y a mi me hará feliz.

  • Autor: Etérea (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 13 de enero de 2011 a las 03:05
  • Comentario del autor sobre el poema: Por los que se limitan a su egocentrismo sin importar otras perspectivas. POR TI.
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 51
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Comentarios2

  • Miguel Eduarte

    Cortito pero al grano. me gusta!!! Te dejo un trozo del cuento El Principito:

    El segundo planeta estaba habitado por un vanidoso:
    —¡Ah! ¡Ah! ¡Un admirador viene a visitarme! —Gritó el vanidoso al divisar a lo lejos al principito.
    Para los vanidosos todos los demás hombres son admiradores.
    —¡Buenos días! —dijo el principito—. ¡Qué sombrero tan raro tiene!
    —Es para saludar a los que me aclaman —respondió el vanidoso. Desgraciadamente nunca pasa
    nadie por aquí.
    —¿Ah, sí? —preguntó sin comprender el principito.
    —Golpea tus manos una contra otra —le aconsejó el vanidoso.
    El principito aplaudió y el vanidoso le saludó modestamente levantando el sombrero.
    "Esto parece más divertido que la visita al rey", se dijo para sí el principito, que continuó
    aplaudiendo mientras el vanidoso volvía a saludarle quitándose el sombrero.
    A los cinco minutos el principito se cansó con la monotonía de aquel juego.
    —¿Qué hay que hacer para que el sombrero se caiga? —preguntó el principito.
    Pero el vanidoso no le oyó. Los vanidosos sólo oyen las alabanzas.
    —¿Tú me admiras mucho, verdad? —preguntó el vanidoso al principito.
    —¿Qué significa admirar?
    —Admirar significa reconocer que yo soy el hombre más bello, el mejor vestido, el más rico y el
    más inteligente del planeta.
    —¡Si tú estás solo en tu planeta!
    —¡Hazme ese favor, admírame de todas maneras!
    —¡Bueno! Te admiro —dijo el principito encogiéndose de hombros—, pero ¿para qué te sirve?
    Y el principito se marchó.
    "Decididamente, las personas mayores son muy extrañas", se decía para sí el principito durante
    su viaje.

  • iana

    aqui veo la necesidad de ser escuchado por la persona que tenes al lado la vida se trata del respeto al otro de la virtud de saber escuchar de valores a transmitir etc...
    me ha gustado mucho me gustaría q me leeas

    • Alejandra G. C.

      Gracias! Claro que pasaré por tus escritos.



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