¡ Hacia ti voy  desnudo ¡

sin mascaras, sin señuelos.,en vuelo de aves levito.

Caen rocíos, soplan brisas.

las espigas sucumben a una nueva tormenta.

Se agitan  cauces de furiosos mares

en mi nave infante y genuina.

El ascua en llamas no lo apaga el agua turbia.

Al borde del cielo,

mi espíritu se adelgaza

en el estrecho de tu aliento.

La tarde se desliza en ti, muda, creciente, y

cuando la noche retoña en germen

excavo tu sombra y emanan raíces.

¡Aun estoy aquí ¡

¡ Al calor de tu mano tibia de diosa.  Mágica pócima del dolor ¡

 Las flores se enderezan altivas.

Su néctar de crepúsculo me moja,

me unge heredero de una noche contigo.

La angustia de pesares en manojo, se disipa al aire,

en crujientes quejidos de mar rompiente.

¡ Hacia ti voy al rescate del olvido ¡

Un racimo de sol, renueva negros en dorados por la planicie de tu falda.

El ocaso se desdibuja y mi boca de hélice,

suelta aspas de besos y coloridas mariposas en tu espacio..

Si no anclan en ti mis besos,

mi alma se daña y  mi corazón se fatiga.

Un arco iris de ilusiones rodea mi guarida.

¡ El mundo cabe en mis manos, cuando en ti la tierra despierta ¡

Para desnudarte me basta una mirada.

            ¡Ah,  inmensa aurora, El cenit de tu vientre me hace novio eterno ¡

¡ Hacia ti voy  con dolores ya apagados ¡

En la vastedad de tu frente, se fraguan asperezas del mundo,

renacen pueblos mustios, con tu fulgor de noche iluminada.

¡ Que no lloren tus ojos al besarme ¡

Limpia el sabor de mis labios,

cuando inclino mi flama ardiente, y hacia ti voy...

¡ Al beso de   una estrella ¡