Aquella tarde de Primavera,
bajo un Sol radiante,
rodeado de hermosas rosas rojas
la tome en mis brasos por vez primera,
para pedirle que uniera su vida junto al mio
para siempre,
Mirandome fijamente a los ojos,
mientras acariciaba mi cabello
me respondio que si
y una tierna sonrisa se dibujo en sus labios
de felicidad.
Un dia Inimaginable que nunca olvidaré
del cual atesoro un recuerdo hermoso y bello
que le dieron sentido a mi existencia.
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Autor:
Claufer (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 11 de diciembre de 2010 a las 15:25
- Categoría: Amor
- Lecturas: 1021
- Usuario favorito de este poema: El Hombre de la Rosa.
Offline)
Comentarios2
Pero es bueno recordar sin nostalgia, aunque no pudo ser. Lindo mostrar tu corazón, sin tapujos. Beso
Un bello recuerdo hecho poesía.
Bello poema amigo Claufer
Saludos
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