Un año después

Ha pasado un año, amor mío.
Un año desde que te fuiste,
un año desde que decidiste dejarme
con todo el amor roto entre las manos.

Un año en el que caí mil veces
esperando que volvieras
a ayudarme a levantarme.
Un año de lágrimas incontables,
un año rogándole al cielo
que todo fuera mentira,
un año esperando un mensaje tuyo,
un año esperándote,
amor mío.

Pero qué ingrata
e inoportuna es la vida.
Después de meses,
de días interminables
y miles de horas
esperando tu regreso,
decidí seguir con mi vida.
Decidí ponerme de pie
con la poca fuerza que aún me quedaba.

En ese año de tu ausencia
aprendí a vivir sin ti.
Aprendí a levantarme
sin esperar tu ayuda.
Aprendí a quererme,
aprendí a confiar en mí.
Aprendí tanto, amor mío,
aprendí tanto sin ti.

Pero qué cruel puede ser el destino:
después de morir en vida sin ti,
regresas.
Regresas como si nada,
después de un año
de tortura
y de una lenta muerte para mí.

¿Por qué regresas a mi vida?
¿Por qué vuelves a remover el pasado?
¿Por qué…
por qué, amor mío?

Verte de nuevo
rompió mi corazón otra vez.
Mi mente volvió a sobrepensar,
los recuerdos regresaron
sin pedir permiso.
Mis manos temblaron,
y mis mejillas
volvieron a empaparse de llanto.

Ver tu sonrisa,
tus ojos,
tu cabello,
tu rostro…
ay, amor mío.

¿Por qué eres tan cruel?
¿Por qué no me siento feliz al verte?
¿Por qué este nudo en la garganta?
¿Por qué no corro a abrazarte
como tantas veces lo imaginé?
¿Por qué no grito
ni salto de felicidad?
¿Por qué mi corazón late desbocado
y mis manos tiemblan?
Ay, amor mío…

Me duele en el alma verte de nuevo.
Me duele el pecho
tenerte a centímetros de mí
y ya no a miles de kilómetros.
Pero, aun así,
me es imposible acercarme.
Mis pies se quedan congelados,
igual que mi voz,
mis manos
y todo mi ser.

Ay, amor mío,
me duele verte
y saber que ya no somos nosotros.
Me duele saber
que nunca más te tendré
acostado en mis piernas
calmando tus preocupaciones.
Me duele aceptar
que ya no sentiré
tus besos,
tus caricias,
tus cuidados.

Ay, amor mío,
me duele,
me mata,
me hiere
saber que tú y yo
ya nunca más
seremos “tú y yo”.

Aunque mi corazón se queda 

atrapado entre recuerdos, 

en un tiempo que se niega a irse, 

en una historia que ya no tiene 

            futuro

Porque, aunque ya no estés
a miles de kilómetros de mí,
aunque hoy te tenga
a un centímetro de distancia,
ya no estaremos juntos como antes.

Porque ya no es antes.
Yo ya no soy la misma.
Y tú…
ya no eres el mismo.