Si fueras algo.

Si tú fueras algo, serías una nota de piano, esa primera pisada del dedo sobre una tecla y después ese desborde de notas y emociones acumuladas. Si fueses algo, serías la tarde de un día de abril en la Ciudad de México, esas tardes apenas arañadas por la luz de un sol que ya se retira, y el ruido de una banda de jazz que ahoga el bullicio de la ciudad. Si fueses algo, serías un arroyito, uno de esos arroyitos que corren en medio del potrero y apenas hacen ruido al correr sus aguas. Si fueras fruta, serías naranja y si fueras sentimiento, serías amor. Si fueras luz, serías luz de fogata bajo cielo de invierno. Si fueras palabra, serías casa, y si fueras tiempo, serías presente. Y la verdad es que lo eres cuando te miro y todo se transfigura en tus ojos.